Señor director: 


El doctor Konrad Adenauer nació en Colonia, Alemania, el 5 de enero de 1876 y creció con sus tres hermanos en condiciones modestas. Esta circunstancia le permitió modelar una vigorosa personalidad de sabiduría política. Tras finalizar sus estudios de derecho, su origen y educación lo condujeron a afiliarse al Partido del Centro, la patria política del catolicismo alemán. 


Hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, la política exterior europea estuvo marcada por la imposición a la fuerza de los intereses nacionales. 


Adenauer había nacido en la era del imperialismo del siglo XIX. Sin embargo, tenía una visión política vanguardista diferente. Sus intereses políticos se caracterizaron desde muy temprano a favor de una Europa más pacifista. Tras la fractura civilizacional causada por la Segunda Guerra Mundial, Adenauer reanudó estas pautas de comprensión política europea, contribuyendo en gran medida a recuperar la seguridad exterior, la soberanía y la igualdad de derechos en la República Federal Alemana. Además, a convertir el país en uno de los motores decisivos del proceso de unificación europeo. 


El nombre de Konrad Adenauer está intrínsecamente unido a la recuperación de Alemania, levantándose de los escombros morales y políticos en los que quedó sumida tras el nacional socialismo. 


Actualmente, en su honor, funciona la Fundación "Konrad Adenauer'', con filiales en varios países, incluyendo Argentina. Es la segunda mayor de las fundaciones políticas alemanas después de la Fundación "Friedrich Ebert''. Fue creada por la Unión Demócrata Cristiana de Alemania, para fomentar a nivel mundial los ideales demócrata cristianos y social cristianos. 


Sucesora de la "Sociedad de Formación Política Demócrata Cristiana'', fundada en 1956, desde 1964 adquiere el nombre del primer Canciller Federal de Alemania Konrad Adenauer. 


Esta fundación ofrece formación política, elabora bases científicas para la acción política, otorga becas a personas altamente dotadas, e investiga la historia de la democracia cristiana, apoya el movimiento de unificación europea, promueve el entendimiento internacional, y fomenta la cooperación en la política del desarrollo. 


Adenauer reconoció que la nueva Alemania solamente podía nacer de la reconciliación con los estados vecinos europeos. 


El Primer Canciller de la República Federal de Alemania persiguió por lo tanto, sin vacilar, el objetivo de reconciliarse con Francia país que durante la guerra había sido su enemigo histórico. La amistad germano-francesa para Adenauer, no fue solamente un medio para conseguir la soberanía en materia de política interior y exterior, por lo menos para Alemania Occidental, sino que era la única manera posible de garantizar un futuro pacífico para todos los europeos. 


La integración económica fue resultado de la de la fundación de la comunidad del Carbón y el Acero que, para Adenauer, siempre fue un instrumento dedicado a la consecución de este objetivo de orden superior. 


En materia de seguridad, Adenauer acompañó esta política de integración Europea intercediendo en favor del rearmamento de Alemania Occidental y de las adhesión a la OTAN, una actitud que le valió muchas críticas durante su gestión gubernativa.