La casa no cumple ninguna de las condiciones necesarias para su recuperación, pero es el único lugar que le prestaron para vivir junto a su mamá y dos hermanos. Ahora les pidieron el desalojo y no tienen dónde ir.

Esta es la situación por la que atraviesa Nazareno Illanes, un nene de 4 años que padece leucemia y al que le hicieron un trasplante de médula en septiembre pasado.

Andrea Castro, su mamá, dijo que necesitan ayuda para salir adelante, porque lo que gana haciendo changas sólo les alcanza para comer. 

La casa es de adobe y tiene dos dormitorios. A uno uno le tuvieron que apuntalar el techo por peligro de derrumbe. Allí duermen los hermanos de Nazareno.

En el otro, que tiene piso y el techo se llueve poco’, duerme él junto a su mamá. Debido a la humedad que se acumuló en la habitación por las últimas lluvias Nazareno se enfermó y comenzó a rechazar el trasplante de médula.

Ahora está en tratamiento medicamentoso para revertir su estado. ‘Los médicos me dijeron que Nazareno no puede vivir en estas condiciones, pero no tenemos otra opción. No sé a dónde vamos a ir a vivir si nos sacan de acá‘, dijo la mamá.

La mujer agregó que esta casa era de la madre de su expareja, padre de sus dos hijos mayores, y que ahí vivió por 14 años pese a que se separó del hombre.

Su exsuegra falleció y los familiares de ella le pidieron que desaloje la casa porque quieren venderla. ‘Es justo lo que me piden, pero no tenemos dónde ir.

Los médicos me hicieron un informe sobre que Nazareno no puede vivir en estas condiciones y yo lo intenté presentar en Casa de Gobierno y en Desarrollo Humano, pero no me lo recibieron. Siempre que fui me dijeron que el Gobernador y el Ministro estaban ocupados. Necesito ayuda aunque sea para alquilar’, dijo la mujer.

Andrea contó que cuando Nazareno tenía un año y ocho meses le diagnosticaron leucemia y comenzó con el tratamiento. Ella tuvo que salir a lavar y planchar en casas ajenas para mantener a su familia porque el padre del nene se fue.

Nazareno recibió quimioterapia durante 8 meses y respondió bien al tratamiento. Pero luego tuvo 3 recaídas que le afectaron el sistema neurológico.

Como consecuencia olvidó caminar y sus hermanos se encargaron de volverle a enseñar. Tras esto recibió un transplante de médula que fue exitoso, pero que ahora está en riesgo. Además no tiene la ayuda ni compañía de sus hermanos. Como también se enfermaron por la humedad de la casa se fueron a vivir con su padre por un tiempo.