Un viaje en el tiempo

Conocer la Casa de Sarmiento de la mano de un guía especializado es ingresar con la imaginación al túnel del tiempo para visualizar al prócer en cada etapa de su vida. Una experiencia que grandes y chicos no se pueden perder. En este marco miles de personas de todas las edades pasan por el Museo Histórico ubicado en la esquina de avenida Libertador y Sarmiento durante todos los días del año.

Casa Natal Domingo Faustino Sarmiento (Fotos: Maximiliano Huyema)


Antes de ingresar, grandes y chicos hacen fila para sacarse una foto junto a la estatua del Maestro de América sentado en un banco como si estuviera leyendo uno de los tantos libros en su haber. Una cita obligada de quienes llegan a visitar su casa natal. Apenas se traspasa la gran puerta de entrada, lo primero que se visualiza es la higuera y sus retoños. Es allí, y casi de forma automática, cuando se enciende la imaginación para ver la figura de Doña Paula -como aparece en los libros de la escuela-, sentada junto a su telar. En realidad ahí los visitantes son recibidos por los guías turísticos de turno para acompañarlos en esta fascinante experiencia. 


En esta visita, los responsables de guiar fueron Melina Santiago y Arturo Sánchez, ambos licenciados en turismo y especializados en la vida y obra de Sarmiento. 


Ellos -junto a otros cuatro guías- son los encargados de contar parte de la vida del prócer, pero sobre todo de narrar anécdotas que lo pintan en su faceta más humana. Una vez recibidos al amparo de la higuera y su historia comienza la primera etapa del recorrido. Se trata de la "Sala Natal", la primera que se construyó en el año 1801 cuando Doña Paula siendo soltera emprendió la construcción de su casa. 'En esta instancia rescatamos su imagen de mujer trabajadora y una luchadora incansable para la época. No era habitual que una mujer tomara la decisión de comenzar a levantar las paredes de su hogar. Además, acá destacamos que este sector es el más antiguo y totalmente original. Basta con ver los pisos para darse cuenta que es así, ya que pudieron soportar dos grandes terremotos", narra Melina.

En una habitación lindante, que forma parte del sector más antiguo, se encuentra el telar de Doña Paula, una verdadera reliquia. "Aquí tejía mantas, frazadas, alfombras con lana de oveja, guanaco o vicuña, según las posibilidades. De ese modo las vendía y obtenía dinero no sólo para llevar adelante la economía familiar sino también para seguir construyendo', agrega Arturo.


Entrar a estos cuartos despiertan la curiosidad y el vuelo imaginativo, acompañados de muchas voces infantiles y adolescentes que visitan más que nunca el hogar de los Sarmiento como cada mes de Septiembre. Todos inquietos, admirados de recorrer junto a sus maestras y guías algo que conocían sólo en los dibujos de los libros o por boca de sus docentes.


Una curiosidad es que son alumnos de Santiago del Estero, los que llegan en mayor número, seguidos por Jujuy, Tucumán, Córdoba, y por supuesto los alumnos sanjuaninos que la visitan a diario. 


El segundo destino es la habitación con el mobiliario usado en la etapa de Sarmiento Presidente. Se trata de muebles, utensilios y enseres que Sarmiento envió de regalo a su hermana Rosario luego que dejara la presidencia. "Ella fue la encargada de guardarlos y cuidarlos de tal manera que pudieran resistir al tiempo', dice Arturo.


Allí se encuentran diferentes elementos, pero se destaca una cama que sirve de herramienta para que los chicos digan su parecer sobre la estatura del prócer ya que es bastante engañosa a la vista porque su terminación bombé esconde su tamaño real que alcanza 1.92 metros de largo. 


'Con este tipo de cosas tratamos de humanizar a Sarmiento, que chicos y grandes puedan verlo como un ser humano', narran los guías.


En la misma habitación en la que se exhiben estos muebles, también se observa un cuadro de Procesa Sarmiento -considerada la primera artista plástica mujer de la Argentina, y dos obras de Eugenia Belín, nieta de Sarmiento que también se dedicó al arte.


Los muebles exhibidos son de una riqueza cultural, artística e histórica únicas, con maderas pesadas y esculpidas a mano. 


La tercera etapa es la cocina con una recreación del fogón, sus chimeneas y espacios amplios para cocinar. Al lado se ve la paila que tanto contribuía a la economía familiar ya que allí se hacían los dulces y conservas de consumo familiar y también para la venta.

"Este espacio es hermoso para rescatar las anécdotas que el mismo Sarmiento narra en su libro Recuerdos de Provincia sobre todo de su niñez. De ese modo vamos respetando la cronología de su vida y su hermosa etapa de niño. Esta es una manera de que chicos y grandes se imaginen a un Domingo Faustino risueño, pícaro como cualquier chico, ya que si son consultados sobre su imagen siempre lo recuerdan con gesto adusto y muy serio. El mismo cuenta en el libro que era inquieto y travieso. Así los chicos empiezan a verlo como un par y les cambia la carita', narra Melina.


Otro de los atractivos es el mate colorado, muy particular, hecho de un zapallito que se le coloca alambre alrededor y va creciendo y tomando diferentes formas.

La puerta de la cocina da directamente a la huerta, una herramienta fundamental para la familia. Allí hay algunos de los vegetales que Doña Paula se encargaba de cultivar para el consumo cotidiano.


En ese sector se ha recreado también la acequia, como tradición de riego para los cultivos y que de hecho era usada para ese fin porque muchos turistas no conocen esta forma de regadío tan típica de Cuyo.


Una vez concluida la visita a la parte más antigua, y tras atravesar la huerta y el patio de homenaje donde hay más de 800 placas de reconocimiento al prócer tanto de entidades nacionales como internacionales, se ingresa a un sector construido recién en 1862. En esa etapa es cuando la casa alcanza su tamaño actual. Por ese entonces Sarmiento cumpliría su mandato como gobernador de la provincia. En otras palabras se deja en el tiempo a Sarmiento niño y adolescente para encontrar al hombre adulto.

Sarmiento funcionario

En esta nueva etapa del recorrido se ingresa a la sector que fue la Casa de Gobierno durante su etapa de gobernador de San Juan. El primer salón es una biblioteca, y por supuesto que esta distribución no es casual, ya que él fue un verdadero autodidacta, un lector incasable, autor de la Ley de Bibliotecas Populares porque por aquel entonces el libro era un bien escaso. Por estos motivos es que cuando la Casa se transformó en museo en 1910 se eligió este lugar para instalar la biblioteca donde además hay un armario con su obra completa. 


Este espacio está siempre muy poblado de chicos pequeños porque allí tienen libros no sólo para leer sino también para realizar actividades. La idea es que quien haga el circuito pase un rato muy agradable. 


Al traspasar ese lugar se encuentra un espacio destinado a parte del mobiliario que usó Sarmiento como gobernador. Esto da pie para que los guías cuenten las diferentes obras que gestó el Maestro de América con fuerte hincapié en la educación pública, gratuita, obligatoria y laica. 


Allí también se narra su paso como embajador de Estados Unidos y su gestión como presidente. En este punto es en el que los visitantes más se detienen para realizar preguntas a los guías.


La última sala para visitar, muy amplia, se destina a exposiciones temporales. Actualmente se expone la obra de Procesa Sarmiento, en la que se destaca la figura de la una mujer de avanzada para la época. Ella se formó con artistas que llegaban de manera itinerante a la provincia y con algunos de Chile donde viajaba esporádicamente para su formación. Se dedicó mucho a los retratos, pero también fue una precursora de lo que hoy se denomina 'collage'.


Además de la descripción de los cuadros -como el caso de un camello que dibujó sin conocer, sólo por los detalles que le daba Sarmiento a través de cartas en uno de sus viajes, se proponen actividades lúdicas a los visitantes. 


Allí se ha instalado una pantalla para que los chicos y grandes recreen las pinturas en los nuevos formatos digitales.


El circuito llega a su fin en el mismo lugar donde comenzó: en el patio donde está ubicada la higuera. Momento ideal para contar que en muchos lugares del país hay retoños de este árbol que salen certificados y con la placa en la que se da validez a esta entrega, previa solicitud a la dirección del Museo, a cargo de Mónica Arturo. 


Las visitas


* Las escuelas que quieran visitar la Casa de Sarmiento deben pedir turno con antelación. Del mismo modo que aquellas docentes que quieran focalizar la visita en temas puntuales.

* Para solicitar turno llamar al: (0264) - 4224603 - 4204567 o completar el formulario de visitas para escuelas en la página: www.casanatalsarmiento.cultura.gob.ar

* Por turno, ingresan 30 chicos al Museo.

* El ingreso es libre y gratuito. Hay un bono contribución de 20 pesos que sólo lo paga quien quiere colaborar.

* Horario de visita: De lunes a viernes de 9 a 20.30. Sábado y domingo de 10.30 a 16

* Dirección: Sarmiento 21 Sur, San Juan

* El circuito dura aproximadamente 30 minutos, aunque se extiende de acuerdo con el grado de interés y curiosidad de los visitantes.


Números
 

4 mil Es el promedio de personas que visita la Casa de Sarmiento cada mes, aunque hay grandes excepciones como septiembre por el mes aniversario del Maestro de América. La cifra se multiplica considerablemente.

13.291 Es la cantidad de visitantes que recibió la Casa de Sarmiento en Julio por las vacaciones de invierno.

4821 Es la cantidad de personas que visitó el Museo en agosto.


Dato

En Facebook (Casa Natal Sarmiento- Museo Histórico Nacional-, se pueden seguir las actividades programadas para cada día y estar al tanto de todo lo que sucede en la Casa de Sarmiento.

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