La sede de Independiente está siendo allanada por orden del juez Luis Armella, que investiga la causa de lavado de activos del club, en donde aparecen muy complicados Hugo Moyano y Pablo Moyano. Además, también hay personal de seguridad buscando documentación en la AFA y la sede de Futbolistas Argentinos Agremiados.

Días atrás, el magistrado había ordenado allanar una financiera vinculada al extesorero del club, Fabio Fernandez, en donde se secuestraron cheques, equipos informáticos, 6.973.076 pesos argentinos, 85.762 dólares, 1.845 euros, 1.370 pesos uruguayos, 5.145 reales y 85 libras. También detuvieron a una persona.

Esta es una de las causas que más preocupan al líder camionero ya que la justicia lo investiga por financiar a la barra brava del club a través de diferentes métodos ilícitos. En esa causa, uno de los principales arrepentidos es Bebote Álvarez, líder de los violentos.

Bebote, que declaró en calidad de testigo, dijo que tanto Hugo como su hijo, Pablo Moyano, extorsionaban a varias empresas de distintos rubros utilizando al club Independiente para "lavar y blanquear dinero" con la firma Aconra, de la familia del ex líder cegetista.

En este sentido agregó que el dinero que ingresaba al club por venta de jugadores que iban a parar a Luxemburgo, paraíso fiscal en el que Independiente tiene una cuenta desde la gestión de Javier Cantero.

El líder barra confesó que ese dinero era puesto a trabajar en el circuito financiero (legal e ilegal) y generaba ganancias que no eran declaradas en los balances del club, en los que sólo se consignaba el monto original surgido de la venta de los futbolistas.