La Policía allanó ayer en El Bolsón una propiedad en la que había estado viviendo Santiago Maldonado, desaparecido desde el 1 de agosto, desde su llegada a la localidad cordillerana hace unos meses. Es en la Biblioteca del Río ubicada en el barrio Los Hornos de El Bolsón.

Según trascendió, el operativo fue ordenado por el juez Federal de Esquel, Guido Otranto, quien se hizo presente durante las acciones. Del allanamiento participaron alrededor de 10 agentes de la Policía Federal Argentina que llegaron al barrio en tres camionetas y un colectivo.

El rumor de que la justicia iba a ingresar al espacio en el que habitaba el joven corría desde el viernes en Esquel. La familia de Maldonado está totalmente en contra de las pericias llevadas a cabo por Otranto y que cuentan con el aval del ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich. Consideran que no se investigan hipótesis que ligan a Gendarmería Nacional con su desaparición y que, por el contrario, están hurgando en la vida personal del tatuador.

El jueves pasado, su hermano Sergio, se lo habría subrayado en Esquel al propio Sergio Milman, el secretario de Seguridad Interior, que se encontraba en la ciudad.

“Es una medida totalmente sorpresiva. La familia no estaba enterada y asustaron a todos los vecinos. Parece que el juez fue a buscar a Santiago a su propia casa cuando la verdad es que Santiago es víctima de una desaparición forzada”, señaló a este diario la abogada de Maldonado, Verónica Heredia. “La madre de Santiago tiene ahora temor de que vaya a su casa en Buenos Aires y entren buscándolo. El juez sigue mirando para otro lado. Si realmente quería obtener datos de su persona hubiera hecho esto desde el principio y no ahora”, agregó.

Maldonado estaba viviendo desde hace tres meses en una habitación de esta biblioteca comunitaria. En la institución se desarrollan habitualmente actividades artísticas y culturales como obras de teatro y charlas.

El viernes, un grupo de manifestantes que participaba en El Bolsón de la marcha por la aparición de Maldonado, quemó una bandera argentina y pintó con aerosol rojo placas conmemorativas de los gendarmes que lucharon en las Islas Malvinas. Se trataría de personas, algunas de ellas de origen mapuche, con vinculaciones a la organización Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) que lidera Facundo Jones Huala, hoy en prisión en Esquel.