El PRO, la principal fuerza dentro de la alianza Juntos por el Cambio (JxC), quitó ayer del camino la principal piedra de la interna en la coalición con la renuncia a ser candidata a diputada nacional en la Ciudad de Buenos Aires de la jefa del partido, Patricia Bullrich. Así la principal fuerza de la oposición dio un paso clave en pos de la unidad de cara a las PASO de donde saldrán las figuras que buscarán una banca en el Congreso en las elecciones legislativas de noviembre próximo.

Con la inesperada declinación de Bullrich, el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que disputa el liderazgo partidario con el expresidente Maurcio Macri, se anotó su primer gran triunfo político y toma vuelo su plan de una candidatura presidencial en 2023.

Tal como la impulsaba la estrategia de Larreta en territorio porteño, la principal espada en la lista a disputados nacionales de la Ciudad será la exgobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, que resistió a capa y espada las presiones de Macri para que compitiera en la provincia de Buenos Aires y cediera a Bullrich el primer lugar en la lista en la Ciudad.

Pero no fue el único movimiento fuerte puertas adentro de JxC. También Elisa "Lilita" Carrió anunció ayer que no será candidata. Lo confirmó mediante un comunicado después que otra de las patas de la coalición opositora, la UCR, lanzara formalmente la candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires del neurocientífico, Facundo Manes.

Por su parte, Bullrich anunció que no jugará en estas elecciones mediante una carta que publicó en las redes sociales. La exministra de Seguridad, uno de los halcones de JxC, fue contundente: "He tomado una decisión y quiero que la conozcan: de aquí en más, dedicaré mis horas, mi experiencia, mi esfuerzo, mi razón, mi sentimiento y mi acción a trabajar por dos grandes objetivos que, estoy persuadida, son centrales entre las preocupaciones y los anhelos de nuestros compatriotas, de nuestra gente", escribió.

"Yo decido no ser candidata para potenciar mi responsabilidad y mi compromiso político. Para hacer mío, con más libertad y fuerza, el afianzamiento de la esperanza de una sociedad que quiere salir, de una buena vez, del populismo y trabajar para superar la pobreza, la inflación, la corrupción, el delito como forma de gobierno, la sumisión de la Ley a la perversión del poder, la destrucción de la cultura del esfuerzo, la mediocridad actual de la educación", marcó Bullrich al declinar su postulación.

Patricia negoció mano a mano el jueves con Larreta y Carrió también trabajó activamente para que su antigua socia en la Coalición Cívica depusiera su candidatura. Como contrapartida Bullrich supervisará los cierres de listas del PRO en todas las provincias y colará diputados y legisladores de su armado. Seguirá al frente del PRO hasta 2023, algo que en la jefatura de Gobierno ponían en duda si Vidal le ganaba una primaria.

En las filas del jefe de Gobierno apuestan a que el ordenamiento en la Capital pueda replicarse en la Provincia; al menos entre los propios y la Coalición Cívica. Jorge Macri, que también se reunió con Rodríguez Larreta esta semana, amenaza con sellar un acuerdo con el flamante precandidato radical Facundo Manes si el vicejefe porteño Diego Santilli confirma sus aspiraciones para competir en la Provincia. "Patricia y María Eugenia son jugadoras importantes, pero el jugador más importante es la unidad", razonan cerca de Larreta.

Carrió se corrió

La exdiputada y fundadora de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, anunció ayer que tras confirmarse la precandidatura de Facundo Manes por JxC en la provincia de Buenos Aire, su postulación en el distrito "carece de sentido histórico" y sería "un sacrificio inútil", y se pronunció en favor de "la unidad de los argentinos".