Frente a la inminente flexibilización de la cuarentena, la viceministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, remarcó que la clave será "mantener la distancia social de metro y medio entre las personas y el lavado de manos".

Estas son las dos principales medidas de prevención pero hay una tercera que urge atender y que forma parte de un reclamo permanente de la comunidad científica: aumentar los testeos para poder identificar las zonas de mayor riesgo y actuar en consecuencia.

En ese sentido, Vizzotti sostuvo que cuando se flexibilice el aislamiento social, "los testeos tendrán un rol muy importante para identificar los casos positivos" de coronavirus. Sin embargo, aclaró que el concepto "testeo masivo" puede prestarse a confusiones:

"La expresión puede llevar a pensar que todo el mundo, los 44 millones de argentinos, se tienen que testear y, por ejemplo, en Corea, que son 55 millones, llamaron testeos masivos a unos 350 mil en un área donde ellos empezaron a tener los casos", subrayó.

En ese sentido, remarcó que los testeos estarían enfocados en "las personas que cumplen la definición de caso, es decir que tienen síntomas compatibles y viven o vienen de un lugar con circulación viral".

Vizzotti precisó que ya se distribuyeron 35.000 test y esta semana ingresaron 50.000 más. "Tenemos que monitorear muy de cerca las actividades que se vayan flexibilizando para ver quiénes empiezan a integrarse a las actividades esenciales y cómo impacta eso en la circulación viral. No podemos cantar victoria todavía", contó.

En la misma línea, el infectólogo Pedro Cahn que forma parte del Comité de Expertos sostuvo que más allá de las actividades que se liberen, es fundamental continuar con el lavado frecuente de las manos y la distancia social de 1,5 metros.