En medio de la pandemia de coronavirus, llamó la atención que la comitiva argentina que encabezó Alberto Fernández se haya reunido con el Papa Francisco y los obispos que lo acompañaron sin barbijo. La postal del cónclave y el encuentro privado posterior retratan esa elección, incluida la que muestra a ambos líderes dialogando solos. Además de la ausencia de barbijos, al menos once personas estuvieron en la misma sala de las instalaciones del Palacio de San Pedro, y sin la distancia social superior al metro y medio.

Desde la comitiva indicaron que esa decisión surgió de parte de los protocolos de la Santa Sede. Esta mañana, el Vaticano envió a un grupo de personas al hotel donde se aloja Alberto Fernández y sus funcionarios para hacerle un test de coronavirus a la delegación. Golpearon puerta a puerta a las distintas habitaciones, y les hicieron los controles a cada uno. Una vez que el resultado arrojó negativo, la visita avanzó normalmente, según informa el medio Infobae.

Fuentes gubernamentales indicaron que la delegación del Gobierno recién se retiró el barbijo al momento de la reunión con Francisco. El Sumo Pontífice siempre estuvo sin barbijo. La impresión, entre los asistentes, es que los sitios por los que transita el Papa Francisco se mantienen asépticos.

No es la primera vez que el Papa Francisco no usa barbijo en sus actos públicos. Desde el año pasado, tanto él como sus colaboradores y personal de seguridad, suelen prescindir de esa protección en las audiencias generales que se convocan en el Aula Pablo VI del Palacio San Pedro. En la Ciudad del Vaticano, es obligatorio llevarla tanto al aire libre como en los espacios cerrados.

El Papa Francisco, de 84 años, y el papa emérito Benedicto XVI, de 93 años están vacunados contra el coronavirus. En enero, recibieron las primeras dosis de la vacuna Pfizer/BioNTech, y poco después fueron inmunizados con el esquema completo.

Fuente: Infobae