La titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, dijo ayer que el uso del helicóptero presidencial por parte de la primera dama, Juliana Awada, para regresar del balneario uruguayo de Punta del Este, es ‘correcto‘, ya que no incumple los parámetros de ‘prudencia y austeridad‘ que manda la ley de Ética Pública.


‘El jefe de Estado y su núcleo familiar están protegidos por la Casa Militar, que le brinda los servicios de seguridad. Sus traslados deben realizarse en vehículos oficiales, por lo tanto está cubierto por la Ley de Ética‘, explicó la titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, en diálogo con radio Mitre.


Alonso agregó que, antes de realizarse el pasado jueves el viaje del helicóptero a Punta del Este, para traer de regreso a la Primera Dama y Antonia, la pequeña hija del matrimonio presidencial, la Secretaría General de la Presidencia hizo una consulta a la Oficina Anticorrupción, para que analice la situación. ‘A la primera dama, que cumple funciones protocolares, también se le aplican los deberes previstos en el Código y la Ley de Ética Pública, lo que quiere decir que debe utilizar en su función protocolar los bienes con austeridad, responsabilidad, honradez y prudencia’, aclaró. En el diálogo, la exdiputada diferenció la situación de otros usos de los bienes del Estado, como el de la flota de aeronaves ‘para mandar diarios impresos a otras provincias‘ o el uso de un ‘avión sanitario‘ para un viaje de descanso. ‘Hay que poner la discusión de la ética y la integridad pública en la agenda’, dijo Alonso y estimó que ‘lo que es incorrecto es el abuso’ de los bienes del Estado.