Desde que decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio el pasado jueves 19 de marzo para hacerle frente al coronavirus, Alberto Fernández no pisa la Casa Rosada. Recluido en Olivos, alterna su agenda entre la quinta presidencial y los distritos del conurbano bonaerense que recorre casi a diario: es, junto a la Ciudad, la zona del país que más lo preocupa en relación con el avance de la pandemia que tiene en vilo al planeta. Allí se concentran poco más del 70% de los casos de la Argentina.

Por el contrario, Santiago Cafiero hace base en la Casa de Gobierno: recibe a ministros y secretarios de Estado, a empresarios y a sindicalistas en paralelo a la agenda del jefe de Estado, y encabeza con frecuencia el gabinete económico que monitorea la crisis social, económica y laboral que se desata a la par de la sanitaria.

Esta mañana, el jefe de Gabinete llegó a Olivos con toda la información que recolectó de esas reuniones de estos últimos días para reunirse con el Presidente y “comenzar a definir la extensión” de la cuarentena, según trascendió de fuentes oficiales, prorrogada hasta el final de la Semana Santa y a punto de volver a aplazarse, al menos, hasta el 23 de abril. A solas, analizaron la situación actual de la evolución de los contagios hasta el mediodía.

Después de ese cónclave, y de un intervalo, el Presidente volvió a recibir en Olivos al jefe de ministros. Pero sumó a parte de su gabinete: Eduardo “Wado” de Pedro, Ginés González García, Martín Guzmán, Matías Kulfas y Vilma Ibarra, según pudo reconstruir este medio.

Es que Fernández quiere saber cómo es la progresión de la cuestión sanitaria, cómo es el impacto en las fronteras y en las provincias, cuáles son, hasta ahora, las repercusiones en los diferentes sectores productivos y de la economía y el panorama del mercado laboral, y con qué herramientas legales cuenta para continuar y, en todo caso, modificar el aislamiento.

El Gobierno no va a comunicar hasta el fin de semana hasta cuándo se extiende la cuarentena. El mandatario primero va a terminar de desmenuzar los parámetros de cumplimiento de estas semanas de confinamiento social, las solicitudes de los sectores de la producción y el trabajo, los pedidos de los gobernadores y la opinión crucial del comité de especialistas convocados a principios de marzo por la Casa Rosada.

Se había previsto en un principio que el sábado se comunicara en forma virtual con todas las provincias. Pero por ahora está descartado. Habría conversaciones por separado.

Fernández está convencido desde hace tiempo de prolongar la cuarentena al menos hasta fin de mes. Todo abril. En coincidencia con los epidemiólogos e infectólogos. Se supone, en esa línea, que el aislamiento podría seguir incluso en buena parte de mayo. Al menos en los principales centros urbanos.

Ayer, el presidente volvió a ser tajante sobre la extensión de la cuarentena, algo que había repetido en privado en conversaciones con funcionarios, dirigentes y empresarios en los últimos días pero que tuvo que reforzar después de notar que durante el fin de semana había habido cierto relajo en la cuarentena por parte de un sector de la sociedad.

“Estamos muy lejos de terminar con la cuarentena”, les anticipó, por ejemplo, a los gobernadores durante la reunión virtual que mantuvieron el martes. El Presidente desde Olivos, en compañía de Horacio Rodríguez Larreta y de Axel Kicillof, los responsables de la gestión del área metropolitana que mantiene en vilo a las tres administraciones.

Ayer, el mandatario reforzó su mensaje en declaraciones radiales y televisivas: resaltó que, efectivamente, la continuidad del aislamiento era un hecho y que en la ciudad y la provincia de Buenos Aires iba a ser igual de inflexible que ahora.

Después de la teleconferencia del martes, Fernández les pidió de hecho a los gobernadores que le elevaran informes hasta este viernes con sus propuestas sobre la extensión de la cuarentena, que culmina en la medianoche del domingo. Los jefes provinciales coinciden con Fernández en que la medida debe extenderse, incluso en muchos casos más allá de abril. Lo mismo cree el Presidente.

Pero hay provincias que quieren tener alguna flexibilidad mayor que la Ciudad y la Provincia desde este lunes. Para empezar, de a poco, a poner en marcha los aparatos productivos del interior y algunas economías regionales.

Entre el sábado y el domingo, el jefe de Estado sí tiene previsto comunicarse en forma virtual con los gobernadores y con el jefe de Gobierno porteño para consensuar cómo sigue el aislamiento, que hasta ahora, según los especialistas, muestra resultados positivos en el achatamiento de la curva de contagios. En el informe matutino de este jueves, el Ministerio de Salud reportó un total de 71 víctimas fatales y 1.795 contagios confirmados.

Con la información de Salud, los documentos que acercaron los industriales, el sindicalismo y la Cámara de Comercio, Fernández, Cafiero y parte de los ministros del gabinete empezaron este jueves a definir cómo y hasta cuándo sigue el aislamiento que rige en toda la Argentina.