Con la salud a cuestas. Algunos medios nacionales dan cuenta que Franco Macri de 87 años está muy enfermo desde hace meses y que "no está en condiciones" de ir a declarar ante Bonadio.

La embestida judicial que tiene contra las cuerdas y en estado de alerta permanente a los empresarios más poderosos del país por las coimas en la obra pública llegó hasta las barbas del poder: Ayer, el juez federal Claudio Bonadio citó a declaración indagatoria a Franco y Gianfranco Macri, padre y hermano del presidente Mauricio Macri, en la causa por los cuadernos de la corrupción del kirchnerismo.

Ambos deberán presentarse el próximo 13 de diciembre en los tribunales federales de Retiro, imputados por el supuesto pago de sobornos en la concesión vial del Acceso Norte y Autopistas del Sol.

Entre los imputados en el caso, que se abrió a principios de agosto pasado, ya se encuentra Ángelo Calcaterra, primo de Macri y dueño hasta 2017 de la constructora Iecsa, una de las más beneficiadas con licitaciones durante los mandatos de Kirchner (2003-2007) y su esposa (2007-2015).

Según fuentes judiciales, Franco y Gianfranco serán interrogados por el presunto pago de sobornos en la concesión vial del Acceso Norte y Autopistas del Sol, dos de las principales carreteras por peaje de acceso a Buenos Aires.

El juez también citó a prestar declaración indagatoria a directivos de Autopista del Oeste, otra de las vías por peaje de acceso a la capital, quienes deberán presentarse ante el magistrado el próximo viernes.

Bonadio también citó nuevamente a indagatoria al detenido exministro de Planificación Julio De Vido. Asimismo deberá comparecer, entre otros, el empresario Eduardo Eurnekian, presidente del conglomerado Corporación América.

En total, la lista de citados a prestar declaración indagatoria abarca a una veintena de directivos de empresas vinculadas a las concesiones viales.

Todos serán interrogados en relación a dichos del extitular del Organo de Control de las Concesiones Viales (Occovi), Claudio Uberti, quien fue aceptado como arrepentido en la causa.

Uberti implicó a todos los citados con el presunto pago de sobornos que eran recaudados por funcionarios nacionales entre concesionarios de empresas viales durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.

En la resolución Bonadio aludió a "montos ilegales recaudados por el entonces titular del Occovi y aportados por los titulares de las concesiones viales".

La familia Macri tuvo el 7% de Autopistas del Sol hasta mayo del año pasado, cuando vendió su parte en US$ 19,7 millones a la empresa Natal Inversiones. Luego del escándalo que se desató con el acuerdo por la deuda del Correo Argentino, los Macri decidieron evitar otro conflicto de intereses y vendieron su participación en la concesionaria de la Panamericana.

La empresa que tenía el 7% en Autopistas del Sol era Sideco Americana, una empresa de la familia Macri, que también participaba en el Acceso Oeste. Fuentes de la compañía señalaron que, hasta el año 2007, Franco era el dueño y tomaba todas las decisiones en la compañía; pero que ese año les cedió todas las acciones a sus hijos Gianfranco, Mariano, Florencia, Mauricio y Sandra.

Sin embargo, quien manejaba la compañía era Gianfranco. Y, por eso, el juez Claudio Bonadio lo citó a indagatoria para este jueves 13, junto a su padre.

En caso de que el juez Bonadio dicte el procesamiento, la situación del padre y el hermano de Macri deberá someterse a un largo juicio y a la posibilidad de una condena. Si se llega a ese extremo, el golpe político para el Presidente sería mayúsculo.

Además serán indagados una vez más los también detenidos exsecretario de Obras Públicas José López, y de Transporte, Ricardo Jaime.

El listado abarca a directivos de 20 empresas vinculadas a concesiones viales y la ronda de indagatorias terminará el 27 de diciembre con De Vido y Jaime.

>> Silencio de familia e independencia judicial

Aunque la posibilidad de que la familia de Macri fuera citada por el juez Bonadio era casi un hecho a medida que avanzaba la investigación, desde el Gobierno se mostraron ayer sorprendidos por el pedido de indagatoria.

"Si (la Justicia) está citando así, evidentemente hoy nosotros no tenemos ninguna injerencia en la Justicia, y lo que estamos haciendo es nombrando a los mejores jueces y removiendo a los malos jueces", dijo José Torello, jefe de Asesores de la Presidencia de la Nación, mientras entraba al congreso del PRO que se llevó a cabo en la tarde de ayer en Parque Norte y que congrega a la plana mayor del partido.

"Me sorprende (la noticia)", agregó el funcionario, escueto. La opinión de Torello, la primera tras la decisión del juez Claudio Bonadio, es relevante porque se trata de uno de los asesores judiciales de Mauricio Macri, integrante de la "mesa jurídica" de Casa Rosada. Luego también hizo referencia a la cuestión la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich: "Son decisiones de la Justicia. No lo tenía en mi radar, no sabía que podía suceder", afirmó. En tanto, Horacio Rodríguez Larreta dijo no tener opinión.