Director del ODS. Para Salvia, "la llegada de inversiones no es suficiente para resolver la pobreza estructural y el desequilibrio cada vez mayor".

La Universidad Católica Argentina (UCA) estimó ayer en 33,6% el índice de pobreza y en 6,1% el de indigencia para el tercer trimestre de este año. De esta manera, para la UCA, la pobreza subió desde el 28,2% de un año atrás, lo mismo que la indigencia, desde un 5,7%, para el tercer trimestre de 2018, en ambos casos en porcentaje de personas. Para el caso de los hogares el análisis arrojó 25,6% de pobreza, también en alza en comparación con el 20,9% del tercer trimestre del 2017, y 4,2%, de indigencia, desde 4,1%. A partir de estas cifras, y teniendo en cuenta que para el Indec la población urbana de la Argentina alcanza a 40,5 millones, son 2,2 millones las personas que ingresaron a la pobreza y 170.000 a la indigencia en un año. La cantidad de pobres en Argentina pasó de 11,4 millones a 13,6 millones, y la de indigentes, de 2,3 millones a 2,47 millones.

Se trata del mayor registro de la era Macri, sólo asemejable con el 32,3% de 2016 que marcó el anterior pico, por la devaluación. Salvo estos dos datos, desde 2010 la pobreza osciló entre 24% y 29%, números igualmente altos que muestran el avance de la pobreza estructural.

El informe de la UCA aclaró que "en 2018 cerca de la mitad de los hogares declararon que sus ingresos no fueron suficientes para cubrir sus gastos". Puso de relieve que "esta tendencia negativa se observa con niveles diferenciados para todos los grupos sociales, destacándose la amplia incidencia en el estrato de trabajadores marginales". También puntualizó que las cifras de indigencia de 4,2% de los hogares y de 6,1% de las personas resultan "los valores relativamente más altos registrados por la Encuesta desde 2010 a la fecha".

En ese sentido subrayó que "la indigencia afecta con más intensidad a los segmentos sociales de la clase trabajadora marginal y a los hogares del conurbano bonaerense". "En ambos casos es donde la indigencia se incrementó de manera significativa a partir de 2014, alcanzando en el tercer trimestre de 2018 a 19,6% y 8,9%, respectivamente". También indicó que "afecta más fuertemente a los niños, adolescentes y jóvenes de 18 a 29 años, y en menor medida a la población de 60 años y más".

En el caso de los niños hasta 17 años, la pobreza alcanza al 51,7%, cifra superior al 44,7% de un año atrás. Así, hay 6,3 millones de niños pobres, frente a los 5,4 millones de un año atrás, es decir, casi un millón más en 12 meses. Esto significa que el 46,3% de los pobres en Argentina son niños.

"Vemos una situación de pobreza estructural que no se modifica", señaló el director del Observatorio de la Deuda Social, Agustín Salvia. "La pobreza estructural sólo se puede reducir con redistribución del ingreso, un modelo económico con eje en las pymes, más empleo y mejores salarios", señaló y advirtió: que "en tanto se mantenga el actual escenario recesivo, sólo cabe esperar un aumento del desempleo, los trabajos de subsistencia y de la precariedad laboral" con efectos directos sobre la pobreza".


Los últimos datos oficiales del Indec

Según la última medición oficial publicada por el Indec, el índice de pobreza en Argentina subió del 25,7% al 27,3% en el primer semestre del año comparado con la última medición, es decir contra el segundo semestre de 2017. A diferencia de la Nación, en San Juan la pobreza bajó en las comparaciones: Según informó el Indec, la pobreza del primer semestre de este año en la provincia fue de 25,4%, un punto menos que en el mismo período del 2017 donde alcanzó el 26,5% de la población. La suba de la pobreza del 1,6% en los últimos seis meses en Argentina resultó menor a la esperada, pero se prevé que golpeará mucho más fuerte en el segundo semestre de 2018 cuando termine por impactar en el bolsillo de miles de argentinos todo el efecto de la dura crisis que atraviesa el país. El propio presidente Mauricio Macri reconoció que "quedan meses muy difíciles por delante".