Otro riñón radical. El economista Javier González Fraga es la segunda figura de la UCR que llega al Gobierno en menos de un mes. A fines de diciembre desembarcó en el Ministerio de Hacienda Nicolás Dujovne.


Con el dedo en el renglón de la gestión y la vista puesta en las elecciones de medio término, que marcará el pulso y el rumbo del Gobierno y el futuro político de la alianza Cambiemos, el presidente Mauricio Macri volvió a mover las piezas del tablero del Gabinete en busca de acelerar las medidas que pongan en marcha la economía. En este marco, Macri sacó ayer de la jefatura del Banco Nación a Carlos Melconían y en su reemplazo designó a Javier González Fraga, un economista radical que fue dos veces presidente del Banco Central.


La otra salida del Gobierno fue la de Daniel Chain, el secretario de Obras Públicas, otra área clave para disciplinar o ganar voluntades en un año electoral.


El reemplazo de Melconían era un secreto a voces por lo que no lo sorprendió el pedido de Macri que privilegió ‘mantener la casa en orden’ por sobre la prolija labor que todos le reconocen al hoy exdirector del Banco Nación, que no tenía buena sintonía con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, ni con uno de sus segundos, Mario Quintana.

‘Fue muy fuerte la presión de la Jefatura de Gabinete’, admitieron fuentes oficiales sobre el pedido de renuncia a Melconían que nunca terminó de integrarse al equipo y marcó su propio rumbo al Banco Nación, la entidad más importante con la que cuenta el Gobierno para generar créditos para la producción y el trabajo.


Estas salidas se sumaron a la del exministro de Economía, Alfonso Prat Gay, que también mantenía una fuerte interna con el propio Melconían y Marcos Peña, mano derecha de Macri en el Gobierno.

La gestión de Melconían al frente del Banco Nación se caracterizó por marcar diferencias respecto a la política económica de Prat Gay y también por sus críticas implícitas a las líneas de crédito hipotecario ajustables por inflación diseñadas por el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, entre otras cuestiones. 


Sobre esa base, Melconian lanzó su propia línea de créditos a la vivienda, a tasa fija del 14% durante tres años y ajustable posteriormente de acuerdo con el aumento a los salarios, logrando así capturar la mayor parte de la demanda del mercado, alrededor de un 70% del total solicitado.


Por su parte, González Fraga, el nuevo titular del Nación, tiene 68 años y acumula una larga trayectoria como consultor privado y funcionario público, surgido de la Universidad Católica Argentina (UCA) y con estudios de posgrado en Harvard y la London School of Economics. Fue titular del Banco Central en las postrimerías del gobierno del expresidente Raúl Alfonsín y continuó en el cargo entre 1989 y 1990, en los períodos de hiperinflación que signaron el final del gobierno radical y el tramo inicial de la presidencia de Carlos Menem. 


A su salida del BCRA, González Fraga se lanzó a la arena empresaria y creó la fábrica de dulce de leche La Salamandra, luego vendida a Cristóbal López, quien terminó cerrando la firma.


En los últimos tiempos, el economista acompañó a Ricardo Alfonsín como candidato a vicepresidente de la fórmula presidencial de la Unión Cívica Radical (UCR) en 2011, aunque su nombre fue centro de polémicas en los últimos meses por algunas declaraciones explosivas.


En mayo pasado, por ejemplo, al pronosticar que la economía mejoraría en 2017, González Fraga excusó al nuevo Gobierno de la lentitud de la recuperación debido a los errores de la anterior administración, entre los cuales incluyó el haberle hecho creer ‘a un empleado medio que su sueldo medio servía para comprar celulares, plasmas, autos, motos e irse al exterior‘. Posteriormente, en julio, el economista radical consideró que el aumento de la pobreza representa ‘cálculos teóricos‘ solamente y afirmó que la clase media estaba en ‘peor‘ situación que los sectores más postergados de la sociedad, ya que este último segmento se ‘colgaba‘ de los servicios públicos o ‘consumía muy poco‘.


‘No desconozco que (la pobreza) se ha agravado, pero ese cálculo de que hay un millón de pobres que pasó del 27% al 32% es un cálculo teórico‘, dijo. ‘Son gente que pasó de estar muy cerca del límite en la parte de arriba a estar muy cerca del límite en la parte de abajo’, analizó el economista radical que viene a reforzar la presencia de la UCR en el Gobierno macrista. Ayer en el escueto comunicado de Presidencia que daba cuenta de su designación se puso en relieve que su paso por el Banco Central ‘contribuyó a salir del pico de hiperinflación’ que hirió de muerte al gobierno de Raúl Alfonsín.
 

Prat Gay, eufórico

Exministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, celebró la designación del nuevo presidente del Banco Nación. ‘Excelente noticia la designación de Javier González Fraga en Banco Nación!! Adelante #Cambiemos! Éxitos!!‘, destacó Prat-Gay en Twitter. 

No a otro cargo

Macri y Melconian se reunieron por una hora en Olivos, en un encuentro en el que el Jefe de Estado lo felicitó por su gestión y le ofreció otro cargo, aunque al parecer el economista volverá al estudio que compartía con su colega Rodolfo Santángelo.

 

Crédito para vivienda a 50 años, su plan

Poco después de la ‘amable’ reunión de Mauricio Macri con el exdirector del Banco Nación, Carlos Melconían, uno de los vice jefes de Gabinete, Mario Quintana, convocó a Javier González Fraga a la Casa Rosada para ofrecerle el cargo que había quedado vacante. González Fraga coincidió con Quintana en que no tenía objeciones sobre la marcha del Banco Nación. Pero ahí mismo, después de aceptar la propuesta que le acababa de hacer Quintana, deslizó cuáles serían sus principales líneas de acción: financiamiento para las pymes, para las economías regionales y para la vivienda.


“Quiero que el Nación pueda dar préstamos hipotecarios a 50 años de plazo”, le dijo González Fraga a Quintana.
Su idea es que el Nación debe adherir de pleno a la línea de créditos UVA que diseñó el Banco Central. Hasta ahora, el Nación se mantuvo al margen de esa operatoria. Melconian no era partidario de dar créditos cuyo saldo deudor se ajusta a la par de la inflación.


En la última entrevista antes de ser nombrado en el Gobierno -que le concedió a MDZ- propuso ponerle un barniz de ‘estado de bienestar‘ al gobierno macrista. De allí su propuesta de que se pueda construir la posibilidad de que en la Argentina se otorguen créditos a 50 años de plazo. También se manifestó a favor de bajar el IVA al 13% para incentivar el consumo. ‘Hay que animarse a bajar impuestos; el IVA debería bajar a la mitad‘, dijo. En cuanto a las definiciones políticas consideró que ‘nadie quiere invertir en el país porque no se sabe si no vuelve el populismo dentro de dos años‘, un frase que también generó muchas discusiones.