Pasada la medianoche el kirchnerismo introdujo decenas de modificaciones en el proyecto de reforma judicial sin previo aviso a la bancada opositora. “Es una verguenza, no se sabe qué se votó”, expresaron en Juntos por el Cambio denunciando que el oficialismo negoció cargos en las provincias para que el avance sobre la Justicia se concrete en Diputados.

Con robusta mayoría en la Cámara Alta que preside Cristina Kirchner era un hecho que el Frente de Todos concluiría la jornada con la media sanción de la iniciativa del Poder Ejecutivo. Sin embargo a última hora del jueves el senador Oscar Parrilli sorprendió quitando su enmienda que apuntaba a condicionar la libertad de prensa. Sería la antesala de una serie de modificaciones con las que el kirchnerismo descolocó a la oposición.

El ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) hizo uso de la palabra y anunció el retiro del término “mediático” del inciso e) del artículo 72 “que tanto los alertó y tantos fantasmas crearon”. En el dictamen original se establecía a favor de los jueces federales un mecanismo arbitrario de denuncia ante el Consejo de la Magistratura que atentaba contra la libertad de prensa.

Pese a tener que eliminar su sugerencia, Parrilli dijo que “cumplió su objetivo” y tras acusar a la oposición de ser “títeres de los medios de comunicación” aseguró que Juntos por el Cambio “se tragó el anzuelo, la línea y la caña; la discusión está y se hizo”.

El senador que responde directamente a Cristina Kirchner tensó aún más la grieta y apuntó al sector más “agresivo” de la oposición que se opuso desde el primer momento a la reforma judicial porque “en realidad están buscando la impunidad de Macri”. Parrilli utilizó la metáfora del “espejo invertido” para sostener que en Juntos por el Cambio “nos acusan a nosotros de lo que ellos son”.

La lista de oradores la cerró el formoseño José Mayans, y María de los Ángeles Sacnun procedió a enumerar durante 15 minutos modificaciones al proyecto previo a su votación.

Entre los principales cambios incorporados a último momento se encuentran: mantener el examen escrito en los concursos de selección, además de las audiencias públicas; los sorteos de causas deben ser grabados bajo apercibimiento de nulidad; no unificación del fuero Civil y Comercial con el Contencioso Administrativo Federal con asiento en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; creación de un tribunal de resolución de los conflictos de competencia de los fueros Civil y Comercial con el Contencioso Administrativo Federal; mantener la exclusividad de las secretarías con competencia en derechos humanos así como a su personal para garantizar “Memoria, Verdad y Justicia”.

Sobre la hora se cambió que las pruebas de oposición ya no serían públicas, se oficializó la quita de la “enmienda Parrilli” y se incluyó la creación de Cámaras Federales en La Pampa, General Roca y La Matanza (Buenos Aires); nuevos juzgados en Buenos Aires: dos en Tigre, uno en Pilar, uno en Tapiales (La Matanza); Jujuy mantiene los tres juzgados pero en la San Salvador; en Corrientes el juzgado va para Santo Tomé; en La Rioja el juzgado de Chilecito va a la capital provincial; el juzgado de Mendoza que tenía alzada en San Luis se modifica y va a Mendoza; se suman dos juzgados en Resitencia y uno en Roque Sáenz Peña, en Chaco, entre otros cambios.

Al término de la senadora Sacnun, irrumpió Luis Naidenoff acusó las modificaciones como “una reforma de la reforma”. “Ni siquiera los señores senadores tienen idea de cuáles son las modificaciones“, agregó el legislador opositor. “No hable por nosotros, conocemos los temas”, respondió Mayans.

“En los últimos 15 minutos de sesión el oficialismo modificó, sin comunicarlo previamente, la totalidad del proyecto volviendo estériles las 11 horas de debate previo”, continuó el jefe del bloque opositor en la Cámara Alta a través de sus redes sociales. “No se sabe qué se votó. Una vergüenza”, insistió.

En una cuestión de privilegio que solicitó Martín Lousteau, dijo: “Nos estamos enterando de un montón de cambios, ya hubo un dictamen y sobre el dictamen hay casi 10 minutos de cambios del dictamen, entre los cuales hay un montón de creaciones de cargos”. “Es muy difícil trabajar así”, concluyó el radical. Mientras que Cristina Kirchner le respondió: “Pero si van a votar en contra...”.

La macrista Laura Rodríguez Machado manifestó su “total y absoluto” rechazo a la reforma judicial y denunció que “este festival de cargos, es simplemente un engranaje más en un todo un plan estratégico para avanzar en el manejo de la Justicia Penal Federal”.

Con 40 votos a favor y 26 en contra el Kirchnerismo logró el primer paso en su avanzada sobre la Justicia. Con la media sanción del Senado, el proyecto pasa a la Cámara Baja donde se prevé un escenario más difícil para el oficialismo. Se esperan largas jornadas de debate y negociación, aunque desde Juntos por el Cambio intuyen que los cargos incluidos a último momento fueron la moneda de cambio.

“El presidente Alberto Fernández creaba con su proyecto de reforma judicial 279 cargos. El oficialismo lo modificó y pasaron a ser 908, tras la negociacion para conseguir los votos que necesitan en Diputados. Y minutos antes de la votación de hoy llegaron a más de 1000 cargos”, expresó Rodríguez Machado. “Es un escándalo”, denunció la senadora.