Al ritmo de los bombos. En la marcha se observaron personas con pancartas de movimientos sociales y mensajes políticos al ritmo de los bombos que habitualmente musicalizan este tipo de manifestaciones.

Miles de manifestantes de movimientos sociales, nucleados en la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa (CCC), marcharon ayer desde la iglesia de San Cayetano hasta la Plaza de Mayo para reclamar por la sanción de una ley de emergencia alimentaria.


En el día del patrono del trabajo, los militantes comenzaron en la mañana la peregrinación desde el santuario ubicado en el barrio porteño de Liniers (ciudad de Buenos Aires), y se congregaron frente a la Casa Rosada para pedir por ‘Pan, Paz, Tierra, Techo y Trabajo‘.


Allí realizaron un acto de cierre encabezado por los dirigentes Daniel Menéndez, Juan Carlos Alderete y Esteban Castro, quienes advirtieron que ‘hay hambre y la responsabilidad es de este Gobierno que mira para otro lado‘.


Antes, las tres agrupaciones hicieron un alto en Plaza Once, donde almorzaron con ollas populares y aprovecharon para confluir con otros grupos de manifestantes, entre los que había gremios pertenecientes a la Confederación General del Trabajo (CGT). De ahí se dirigieron hacia el Congreso de la Nación, a entregar un petitorio con firmas para reclamarle a los legisladores.


Con un discurso que tuvo muchas críticas al Ejecutivo y a su plan económico, Castro sostuvo que ‘el problema no son los que no tienen trabajo, el problema es que este gobierno los lleva a la marginalidad‘. Uno de los principales reclamos fue que el oficialismo acceda a debatir en el Congreso un proyecto presentado por los movimientos que sancione una emergencia alimentaria, debido a la malnutrición de los niños que asisten a comedores. Entre los pedidos al Gobierno, Alderete sumó ‘salarios y jubilaciones de acuerdo al costo de la canasta familiar‘. Hacia el cierre del discurso, Castro agradeció el acompañamiento de la CGT y de la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma, al tiempo que recordó que el 22 de agosto acompañarán la marcha.
 

‘Cierran puertas del corazón’

El arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, advirtió ayer que ‘se cierran las puertas del corazón‘ de quienes deben dar empleo digno, ante miles de personas que acudieron al santuario de San Cayetano en Liniers para pedir trabajo. El purpurado porteño presidió la misa central en honor al santo de la Providencia en el templo de Cuzco al 100.