En el Gobierno y en el oficialismo gana fuerza el plan de prorrogar hasta el último trimestre todo el calendario electoral del año. De todos modos, la idea es no eliminar las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO). En concreto, esperan hacer las primarias en septiembre y las elecciones generales en noviembre, ante la necesidad de adaptar el llamado a las urnas por las particularidades epidemiológicas de 2021.

Sobre todo, considerando que este es un año atravesado por la pandemia del coronavirus (Covid-19) y al que el oficialismo encara con una prioridad casi absoluta: la de completar la vacunación de los grupos de riesgo para llegar, finalmente, a la "inmunidad de rebaño".

En el Gobierno y en el oficialista Frente de Todos (FdT) están cada vez más convencidos de la necesidad de introducir cambios en las fechas previstas para las primarias y las elecciones generales de este año, ya que observan con preocupación las noticias que llegan desde el Hemisferio Norte sobre el rebrote de coronavirus.

En este marco, el oficialismo tiene todo su esfuerzo desplegado en el avance de la campaña de inmunización contra la Covid-19 y en las previsiones que indican que la "inmunidad de rebaño" (tener vacunada a la mayoría de la población) podría alcanzarse entre agosto y septiembre, aunque por otro lado la experiencia de 2020 muestra que el pico invernal suele coincidir con la mayor cantidad de contagios.

Estos antecedentes explican por qué en el FdT se menciona cada vez con más fuerza la posibilidad de postergar todo el cronograma -sin suspender las PASO, ya que en el Congreso no hay consenso para hacerlo- y concentrarlo en el último trimestre del año.

Esta alternativa se mencionó en la reunión del jueves último en la Casa Rosada en la que estuvieron el presidente Alberto Fernández, el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa; el jefe del bloque del FdT en la Cámara Baja, Máximo Kirchner; el jefe de Gabinete Santiago Cafiero y el ministro del Interior Eduardo "Wado" de Pedro.

La propuesta, aún en etapa de definición, consiste en retrasar la primaria del segundo domingo de agosto (como está prevista hoy) al último domingo de septiembre, y en el caso de la elección general aplazarla del cuarto domingo de octubre (como deberá realizarse si no hay modificaciones) al mes de noviembre.

En definitiva, la iniciativa apunta a concentrar toda la actividad electoral, que implica necesariamente movilización y circulación de personas, en los últimos tres meses del año, cuando ya haya pasado el invierno y la mayor parte de la población -se espera- esté ya inmunizada, informaron fuentes del oficialismo.

Incluso, en el FdT hay voces que plantean que la realización de todas las elecciones del año, sean provinciales o de alcance nacional, debe ser previamente consultada con el Consejo Federal de Salud (Cofesa), que reúne a los ministros y secretarios de Salud de la Nación y de las 24 jurisdicciones.

Sin embargo, cualquier modificación en el calendario de las elecciones debe ser aprobada por las dos cámaras del Congreso y con mayorías calificadas, requisito que no será fácil y del que ya se pudieron observar algunos indicios, como una serie de tuits posteados por el opositor Mario Negri, titular del interbloque de Juntos por el Cambio en Diputados. "Estamos en contra de suspender las PASO", tuiteó el dirigente radical.

Además, el propio presidente Alberto Fernández, en la entrevista que Página 12 publicó también ayer, subrayó la existencia de una "razón epidemiológica" que recomienda evitar aglomeraciones de gente.

En cualquier caso, en la Casa Rosada hay una definición consolidada y es que el jefe de Estado no se involucrará activamente en el debate por modificar la legislación electoral.

Sin embargo, la alternativa de postergar por 30 días las primarias y las elecciones generales no es la única que se menciona en el oficialismo. Por un lado, la suspensión lisa y llana de las PASO sigue interesando a algunos sectores del oficialismo aunque por el momento parece de imposible realización.

Varios sectores de la oposición, pero también hacia adentro del FdT, consideran que debe preservarse el derecho de los ciudadanos a elegir con el voto los candidatos de cada coalición electoral.

En la coalición oficial circula una tercera propuesta, por ahora como borrador: realizar las PASO y las generales en el mismo día. Plantean que esa alternativa, en el caso de encontrar eco, respondería exclusivamente a criterios epidemiológicos.

Télam