Dos siamesas que nacieron en la ciudad de Córdoba unidas por el tórax y el abdomen permanecían ayer estables y conectadas a un respirador artificial, mientras que en los próximos días serán sometidas a estudios para precisar el estado de salud.

Las niñas nacieron el miércoles, por cesárea, en el Hospital Materno Neonatal, informó ayer el ministro de Salud provincial, Oscar González. Las bebas, cuyos padres son oriundos del interior de la provincia, presentan una fusión cardíaca y comparten el hígado. Las niñas pesaron 2,5 kilogramos cada una, reportó el funcionario.

El jefe del Servicio de Cirugía del Hospital Privado y del Hospital de Niños, Víctor Defagó, por su parte, explicó que la fusión cardíaca "no implica que sean dos corazones pegados, ni un solo corazón". "Son corazones que se fusionaron por un defecto embrionario severo", sostuvo el especialista tras evaluar a las niñas.

Los siameses son producto de embarazos gemelares, que se gestan a partir de un solo óvulo. En ese tipo de embarazo los fetos no se desarrollan en forma independiente, sino que permanecen unidos. La unión puede producirse por el abdomen (toracópagos), por la espalda (pigópagos), pelvis (isquiópagos) o por la cabeza (craneópagos).