Señor director:


No es la primera vez, ni será la última, que me dirijo a este medio para denunciar o exponer la calamitosa realidad que vivimos los regantes y vecinos en general, en relación a la basura que lamentablemente arrojan otros vecinos del lugar. Esto es en el Canal Isla, que corre de Oeste a Este, sobre calle Salta y Saavedra en el departamento de Chimbas. Los días jueves, pasado el mediodía, llega la ansiada y vivificante agua a dar vida a los cultivos y arboleda del lugar. Siempre la misma y patética escena: los sifones e incluso el mismo canal colmado de basura. La variedad de esta da para todos los gustos; las mujeres arrojan sus toallas femeninas sin ningún tipo de pudor. Hay también pañales y ahora se sumaron los barbijos. Ahí están los empleados municipales siempre dispuestos a la limpieza, pero agotados. No sé si esta tarea le corresponde al Departamento de Hidráulica. Sobre la calle Saavedra, más hacia el Este, donde dobla el canal hacia el Sur, se ha constituido en un gran depósito de basura, justamente donde se levanta un cartel prohibiendo arrojar mugre. En este punto vive el señor Darío Delgado y familia; el hombre se ha cansado de discutir o tratar de persuadir algunos vecinos aledaños a su vivienda, para que no arrojen basura, pero no ha logrado nada, sólo lidiar. Estos vecinos saben que las movilidades municipales pasan y recogen los deshechos, las hojas se dejan en recipientes aparte. Ellos tienen los típicos basureros -en las salidas de sus casas- para depositar las bolsas; pero increíblemente van a los sifones. Creo, y ahora más que nunca, por la situación que vivimos, las multas y o sanciones tendrían que cumplirse a rajatabla. Es decir: tolerancia cero.

Edmundo Jorge Delgado
Docente