Juan Carlos Romeu, presidente de Defensores de Los Berros


La vida en los pueblos se transita de manera distinta que en los centros urbanos más poblados. El fin de semana es una amalgama entre lo deportivo y social. Se trata de una especie de ritual. Hombres, mujeres, niños, adultos mayores, todos esperan el momento de ir a la cancha del club del pueblo. Cualquiera que lo mire desde afuera podría decir que es una locura. Pero, no. La verdadera razón es porque la vida social, gira alrededor del deporte en el Club Defensores de Boca, de Los Berros, en Sarmiento. Lo mismo sucede también en la otra institución deportiva del pueblo, el Deportivo Los Berros. Ambas instituciones forman parte de una red de contención social para todos los habitantes. Allí, todos los vecinos comparten momentos de amistad, de practicar diversos deportes, ver a niños y adolescentes jugar en sus respectivas categorías hasta que le toca el turno a las estrellas de primera división. Se disfruta mucho el fin de semana. Siempre hay un evento social y es por eso que Boca tiene un amplio salón para que los socios disfruten de cumpleaños, casamientos y diversas reuniones familiares. Su presidente es Juan Carlos Romeu. Hace unos 15 años que llegó a trabajar desde Mendoza. Sin embargo decidió quedarse porque ama a este pueblo donde el trabajo es cultura y el esfuerzo en la industria calera hace a los hombres de una fortaleza bravía que se manifiesta hasta en la forma de jugar al fútbol o cualquier deporte, cuenta el directivo. "Nunca se dan por vencidos. Son de carácter guerrero cuando hay que jugarse por el club". En esta institución se practica vóleibol, futsal ambos sexos y fútbol, 11 femenino. Es decir que la mujer también está plenamente integrada a la entidad. Lo que hace que la institución sea netamente familiar. En ese contexto, Defensores de Boca lleva varias temporadas compitiendo a nivel federal ya que participó del Torneo Federal Amateur de Fútbol, que organiza el Consejo Federal de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Es por eso que crecer es una de las banderas que levantan. Uno de los objetivos que tiene previsto el club es la construcción de las tribunas. Ya están en plena instalación de los reflectores para jugar de noche. El presidente Romeu define a Defensores de Boca como un club de "muy buena gente". Es que la identidad de sus deportistas se lo da la bravura con la que sus mayores trabajan los cerros para obtener la riqueza calera. Ser minero es el orgullo de este pueblo que con carácter y temperamento, cada día lucha para engrandecer su club.



Por José Correa   DIARIO DE CUYO