Señor director:

Frente a la posibilidad de que la Virgen de Fátima llore en los jardines de infantes, de la Parroquia de Villa Krause, y en consonancia con las declaraciones de Monseñor Lozano, quiero manifestar mi humilde opinión como vecino de esta centenaria villa. Lamentablemente, esta comunidad parroquial ha sido la más perjudicada dentro de la iglesia católica sanjuanina, por los errores pastorales de Alfonso Delgado.

Ejemplo de esto fue el traslado del padre Paquito Martín, el 19 de febrero del año 2004. Este sacerdote había logrado que la parroquia tuviera un lugar destacado en la vida social de Rawson. Un ejemplo de ello fueron las multitudinarias fiestas patronales y la tarea de evangelización llevada a cabo por las siete escuelas y la desaparecida radio "Virgen María''.

A trece años de la decisión errónea tomada por Delgado, la parroquia de Nuestra Señora de Andacollo atraviesa una crisis lamentable. Falta de presencia sacerdotal, escasa asistencia de los vecinos a las celebraciones litúrgicas, desarticulación de las instituciones laicales, en especial la catequesis, crisis en la administración y dirección en los siete colegios parroquiales.

Esto último, producto de un alejamiento paulatino de los valores cristianos, tratando de implantar ideas empresariales y jurídicas que no están de acuerdo con el Evangelio de Jesús.

La Virgen llora y pide conversión, según el sacerdote Afredo Ariza. Nosotros, como vecinos, esperamos que la conversión no sólo sea de los laicos, sino también de los pastores y de quienes lo rodean, ya que Rawson es una tierra que suspira por tener una iglesia católica con olor a ovejas, que presente su fe en las pequeñas cosas cotidianas de la vida pastoral.