El compromiso de Rotary es que la polio se erradique definitivamente. Esa es la lucha se practica con consejos saludables a la comunidad. 

Rotary Internacional hace décadas estableció el "Día Mundial de la Lucha Contra la Poliomelitis", para conmemorar el nacimiento de Jonas Salk, investigador médico y virólogo estadounidense, que dirigió el primer equipo para desarrollar una vacuna contra esa enfermedad. El día fue un 24 de octubre, para iniciar mundialmente la lucha contra ese mal, que es una enfermedad muy contagiosa causada por el virus polio, que invade el sistema nervioso y puede causar parálisis en cuestión de horas. Según los científicos, este mal afecta sobre todo a los menores de cinco años y no tiene cura, pero es prevenible con vacunas, tarea que emprendió Rotary para salvar vidas, siendo la aplicación de la vacuna (oral e inactiva) lo que redujo dinámicamente la polio paralítica, transformada en uno de los programas de salud pública más exitosos. Debemos comprender la enfermedad que estamos a punto de erradicar siendo importante asociarla a experiencias de vida. Los casos han disminuido en más de un 99 por ciento desde 1988, cuando se calculó que había 350 mil casos en más de 125 países endémicos, en comparación con los 359 mil notificados en 2014. Actualmente la poliomielitis sigue siendo endémica solo en dos países (Afganistán y Pakistán).


El compromiso de Rotary es que la polio se erradique definitivamente y esa es la lucha que se practica llevando un consejo sano y saludable a nuestra comunidad. Una enfermedad está erradicada cuando no se presentan más casos en el mundo y el virus deja de circular.


Según datos estadísticos, hasta el momento, la única enfermedad erradicada es la de la viruela en 1979 y se sigue trabajando para que la poliomelitis sea la próxima. De acuerdo a datos oficiales desde hace más de treinta años estamos sin polio en la Región de las Américas. Por ese motivo este 24 de octubre es una fecha memorable para renovar el compromiso del final de la erradicación y comenzar a prepararse para el proceso de documentación y certificación de un final mundial. Este reto mundial se realiza con la inversión de muchos millones de dólares, esperando que la Organización Mundial de la Salud certifique oficialmente al mundo, como libre de polio. Se continuará vigilando que el virus no vuelva a presentarse, ayudando a nuestra sociedad a eliminar esta segunda enfermedad humana del mundo que con muy poco se logrará con los objetivos de salvar vidas. Un mundo libre de polio es posible, pero solo podremos alcanzarlo si tomamos acción todos juntos.

Por Roberto Olivera Vega
Periodista