Juan Pablo II, "siervo de Dios" por sus "virtudes heroicas" como fuera proclamado el 21 de diciembre de 2009; primer paso hacia su beatificación, proceso que se inició el 28 de junio de 2005. El pontificado de Juan Pablo II duró 26 años, 5 meses y 17 días y fue uno de los más largos de la historia.

En los últimos diez siglos de la Iglesia Católica ningún Papa proclamó beato a su predecesor como ocurrirá el 1 de mayo próximo, cuando Benedicto XVI eleve a la gloria de los altares a Karol Wojtyla.

Stawomir Oder con Saverio Gaeta son los autores de la producción "Por qué es Santo" editado en setiembre de 2010, impreso en Barcelona (España).

Stawomir Oder es el postulador de la causa de la beatificación de Juan Pablo II. - "Fui yo el que tuvo el honor de ejercer esta función en la causa de beatificación de Juan Pablo II. Y este libro pretende describir, en la medida de lo posible, el trabajo que se llevó a cabo", acota en el prólogo el escritor.

Nació en la misma tierra de Karol Wojtyla, en Chelmiza (Torún). Cuando en octubre de 1978 su Santidad fue elegido para ocupar el solio pontificio, el postulador había terminado el bachillerato y estaba a punto de entrar en el seminario diocesano para seguir la vocación sacerdotal que, desde hacía varios años, maduraba en su interior.

La solapa de la tapa del libro tiene grabada las biografías de los autores: Stawomir Oder (Polonia, 1960) se graduó en Derecho Canónico y Economía y Comercio. Sacerdote diocesano, es rector de la iglesia romana de Santa María Inmaculata y San Giuseppe Benedetto Labre. Fue director de la Oficina Legal del Vicariato de Roma, de cuyo Tribunal de Apelación es hoy, presidente. Se ocupó de la beatificación del mártir polaco Stefan Frelichowski, en el 2005 fue designado, por el cardenal vicario Camilo Ruini, postulador de la canonización de Karol Wojtyla, Juan Pablo II.

Saverio Gaeta (Italia 1958), quien comparte la autoría de la publicación mencionada, es graduado en Ciencias de la Comunicación Social. Fue redactor del diario L'Osservatore Romano y jefe de sección del mensuario Jesús. Es jefe de redacción del semanario Famiglia Cristiana. También todos los sábados a las 12.30 tiene un espacio en Radio María.

Entre sus libros, traducidos a varios idiomas podemos destacar "El soplo del espíritu" (2005), las biografías del padre Pío de Pietrelcina, del Papa Juan XXIII o de la Madre Teresa de Calcuta y los dedicados a los milagros y la devoción.

Las virtudes -fe, esperanza, caridad; pero también prudencia, justicia, fortaleza y temperancia- emergieron con toda su fulgida plenitud gracias a los testimonios de todos los que intervinieron en el proceso de canonización.

Para la Iglesia Católica, de hecho no es suficiente la denominada "fama de santidad", esto es la general convicción de los fieles sobre los méritos de un candidato, que en el caso de Juan Pablo II, se manifestó abiertamente en los carteles que rezaban "Santo ya" que se exhibieron en la plaza San Pedro el día de su funeral. Y también el milagro -que es así mismo necesario, ya que está considerado el "sello de Dios"- se acepta en su segundo momento, cuando la opinión de los teólogos asesores, el consenso de los cardenales y de los obispos y la consolidación del Papa han confirmado "la posesión de las virtudes cristianas en grado heroico", opinan los dos escritores y eruditos en el tema.

"Fui yo el que tuvo el honor de ejercer esta función en la causa de beatificación de Juan Pablo II. Y este libro pretende describir en la medida de lo posible el trabajo que se llevó a cabo". "Fue un encargo que superaba ampliamente mis capacidades", escribe Stawomir Oder.

En este ámbito, corresponde al postulador, un especie de "abogado defensor" del candidato al reconocimiento de la santidad, poner en evidencia los episodios que acrediten de forma más funcional, la realidad de los hechos.

Leemos en el libro, que las deposiciones de las fuentes procesales se citan anónimamente para tutelar la privacidad de los testigos, mientras que los nombres consignados en el texto están relacionados con los testimonios realizados fuera del proceso.

Se organizan con: un prólogo, tres capítulos: el hombre, el Papa, el místico; un epílogo y una Cronología sintética de la vida de Karol Wojtyla.

Los productores rescataron la imagen de uno de los grandes protagonistas del siglo XX; la de un creyente capaz de vivir en carne propia el mensaje evangélico; sensible a la pobreza, a las necesidades de los demás pero también espiritual y alegre. Un hombre capaz de perdonar y reconocer la grandeza del prójimo como lo muestra la carta inédita a Ali Agca, que atentó contra su vida. Realmente, resultó ser un precioso tributo a la verdad.

El Papa Benedicto XVI dijo a Monseñor Stawomir cuando se enteró de la misión encomendada: "Dese prisa, pero hágalo bien, de manera irreprochable", su recomendación fue la "contraseña" que lo acompañó durante todo el proceso.