Hoy se conmemora el Día Mundial Libre de Tabaco, destinado a destacar la importancia de la lucha contra la epidemia del tabaquismo, la principal causa de muerte prevenible en todo el mundo.

Ni las medidas restrictivas para fumar en lugares públicos, ni las campañas contra del tabaco, ni el aumento de precio de los cigarrillos, han podido hacer descender en forma sustancial el número de fumadores en nuestro país. Cerca de ocho millones de personas, un 34% de la población, no puede controlar la adicción que crea la nicotina en el cerebro y lo difícil que representa para el organismo rechazarla. La nicotina es la causa principal de la adicción, pero el humo es el causante de enfermedades y muertes asociadas al cigarrillo. Provoca daños en tejidos y órganos vitales, debido a las sustancias que contiene: 4000 tóxicos y 40 agentes cancerígenos.

También son conocidos los efectos del cigarrillo en los fumadores pasivos, que respiran el humo en un ambiente donde se fuma. Recientes estudios publicados en la revista de la Academia Americana de Pediatría señalan un nuevo peligro asociado al humo del cigarrillo que afecta particularmente a los más chicos. Según los médicos del Hospital General de Massachussets, la invisible mezcla de gases y partículas que permanecen adheridas al pelo y la ropa de los fumadores, junto con las que quedan depositadas en los muebles y alfombras y que persisten durante mucho tiempo, después de ventilarse un habitación, son una verdadera amenaza para la salud de los niños. Estos residuos incluyen metales pesados, sustancias cancerígenas e incluso materiales radiactivos que los chicos pueden tocar o incluso ingerir, especialmente cuando gatean o juegan en el piso.

En la Argentina, el tabaquismo afecta cada vez a más personas con unas 40.000 muertes anuales por enfermedades relacionadas con el hábito. La "Alianza Libre de Humo Argentina" (Aliar) señala que tres de cada diez chicos de 13 a 16 años fuman en nuestro país, con alto riesgo de sufrir enfermedades respiratorias infecciosas, cáncer y problemas cardíacos.

Un estudio realizado en EEUU demostró que a partir de 1976, las compañías tabacaleras empezaron a ver garantizada la base del negocio en los jóvenes, para tener consumidores en forma permanente. Los especialistas aseguran que el 50% de los fumadores morirá a causa de una afección vinculada al tabaco que, en promedio, quita entre 8 y 10 años de vida.

Combatir el hábito de fumar es respetar el derecho de la gente a una vida saludable y plena.