El papa Francisco, en su reciente Exhortación Apostólica "Amoris laetitia", reseñando algunos desafíos para la familia actual, se refiere a la "ideología de género": "Otro desafío surge de diversas formas de una ideología, genéricamente llamada "gender" (género) que niega la diferencia y la reciprocidad natural de hombre y mujer. Esta presenta una sociedad sin diferencias de sexo, y vacía el fundamento antropológico de la familia" (AL, 56).


En efecto, la "teoría de género" es una nueva ideología que enseña que hay un sexo biológico, con el que nacemos, pero, a la vez, toda persona podría construir libremente su identidad sexual o género independientemente de aquel. Por lo tanto, considera a la sexualidad humana como un elemento maleable y elegible por el individuo, y por ello, las diferencias varón-mujer serían sólo una mera convención social o construcción cultural "hecha" según los "estereotipos de género" asignados a los sexos en la sociedad a lo largo de la historia, y que deben ser reformulados mediante una "ingeniería social" llevada a cabo en todos los ámbitos.

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Simone de Beauvoir (1986), una de las más influyentes ideólogas del género, enseña que, a pesar de que existe diferencia biológica entre varón y mujer, la persona en realidad es neutra sexualmente y es socializado como masculino o femenino. Es la sociedad quien ha dado determinados oficios al varón y la mujer, modelando las personalidades y causando las diferencias, que en realidad son una creación cultural. Conocido es su aforismo: "No naces mujer, te hacen mujer". Según sus afirmaciones, el varoncito juega a la pelota porque ya está así determinado socialmente; y la nena juega a las muñecas, por una imposición machista. Así, despreciando el concepto de sexo y substituyéndolo por el de género, se pretende que la gente elija arbitrariamente a qué género quiere pertenecer, independientemente de su sexo biológico. En esta ideología, cada persona puede construir libremente su género, y lo puede cambiar, cuantas veces lo estime necesario. Escribe Francisco: "Esta ideología lleva a proyectos educativos y directrices legislativas que promueven una identidad personal y una intimidad afectiva radicalmente desvinculadas de la diversidad biológica entre hombre y mujeres inquietante que (estas ideologías) procuren imponerse como un pensamiento único que determine incluso la educación de los niños. No hay que ignorar que el sexo biológico (sex) y el papel sociocultural del sexo (gender), se pueden distinguir pero no separar" (AL, 56).


Ricardo Sánchez Recio, Orientador Familiar - Licenciado en Bioquímica.