“Las colonias de verano han ido mejorando año a año, principalmente en aspectos de la salud, este año con la alimentación, además de las actividades recreativas. Y son un éxito precisamente porque cada año se va elevando la vara y les da a los chicos lo que no siempre tienen, con niños de escasos recursos que de otra manera no podrían acceder a una colonia paga. Pero también, las colonias sirven para que no estén en la calle, para que durante todas las mañanas estén ejercitándose, asumiendo responsabilidades, asimilando buenos hábitos de salud o de higiene.

Las deserciones en las colonias casi no existen justamente porque los chicos no se aburren, no se sienten mal o incómodos. Si eso pasara, cada vez serían menos y se da todo lo contrario.


La experiencia de tantos años también es clave porque ya sabemos lo que más les gusta a los chicos y tratamos de usufructuar ese conocimiento. Por ejemplo, apostamos más por las actividades recreativas y las disciplinas deportivas, como el fútbol, el vóley, la natación o el ajedrez”.