La Plaza 25 de Mayo está por estos días en un proceso histórico de restauración.

Bien avanzado el siglo XVI de la fundación de San Juan y hasta el siglo XVIII, la plaza se parecía más a un potrero, según varios escritos. Pero hubo una primera vez para producir mejoras e imponerle características que poseían espacios similares en Buenos Aires, Santiago de Chile y en ciudades europeas visitadas por algunos sanjuaninos destacados. Así, cuenta el profesor Cesar H. Guerrero que el primer gobernante que se ocupó de la ornamentación de este espacio público fue José Ignacio de la Roza, quien ordenó la primera plantación de árboles a lo largo de su periodo gubernamental entre 1815 y 1820. Pero, hubo que esperar a que Domingo Faustino Sarmiento fuera gobernador (1862-1864) para que se tomaran medidas definitivas que permitieran que la plaza fuera realmente un lugar de esparcimiento y paseo público. 


Sarmiento y su visión de futuro


Al mismo tiempo, el ilustre sanjuanino sugería "barrer las veredas para adecentar el sencillo rostro urbano", como escribió en el número 58 de El Zonda, en 1862. En la plaza se pudo ver entonces un frondoso arbolado como nunca antes "y un trazado de paseo o caminos transversales, proyecto que debió terminar otro dinámico mandatario que le sucediera, Camilo Rojo (1864-1868), con nuevas plantaciones y arreglos ornamentales", afirma Guerrero. 


Precisamente Rojo le cuenta en una carta a Sarmiento cómo siguen las obras que él iniciara: "La plaza ya la tengo terraplenada con buena tierra vegetal, bien nivelada y plantada la segunda calle interior, y en el centro va un círculo de naranjos. Tengo la esperanza de traer el agua de Zonda, y hacer en ese círculo una pila (fuente)".


Con el tiempo, se plantaron acacias blancas con las típicas acequias para regarlas, y después el paseo fue rodeado de pimientos (aguaribay).

La fuente de agua 


Posteriormente, en el mandato de Valentín Videla (1871-1872, se concretó la construcción de una pila de agua para ser colocada en el centro de la plaza. Más adelante, el 15 de diciembre de 1875, el gobernador Carlos Doncel encargó a una comisión que gestionara una suscripción pública para construir un jardín en la plaza. Y fue en 1884, coincidiendo con la última visita de Sarmiento y la inauguración de la Casa de Gobierno (destruida en 1944) sobre la actual esquina de General Mariano Acha e Ignacio de la Roza, cuando se puso en marcha el servicio de agua potable. Así, tras 65 años de proyectada, por primera vez brotó agua de la pila que se levantó en el medio de la plaza, donde aún hoy existe.


Desde entonces "la plaza sufrió distintas reformas y nuevos trazados conservaron los jardines en cuadros irregulares, mientras los paseos se enripiaron y luego se embaldosaron en la forma actual". 


La inauguración más formal de la plaza "25 de Mayo" tuvo lugar en 1902, bajo la gobernación de Enrique Godoy (1902-1904). A su vez, la iluminación llegó en 1908 y, previamente, el 9 de julio de 1897 se había inaugurado la estatua a Santa María de Oro, y el 17 de noviembre de 1901, la de Domingo F. Sarmiento. 


El viento Zonda y los grandes temporales muchas veces causaron estragos en la plaza, pero siempre se recuperó con prontitud la belleza del kilómetro Nº 1 de la Capital, declarado Patrimonio Histórico Municipal. 


Obras de restauración


Ahora, se acaban de iniciar obras de restauración dispuestas por el intendente Emilio Baistrocchi tras una serie de consultas a especialistas, arquitectos, ingenieros y el aporte de sugerencias, de ser necesarias, desde la Dirección de Patrimonio Provincial y Consejo de Patrimonio Cultural y Natural. A todo ello se suma la mirada puntual de Accodepas (Asociación Civil para la Conservación y Defensa del Patrimonio Sanjuanino), con quien el municipio firmó un convenio de cooperación.


La inversión, que es de 40 millones de pesos, incluye el recambio del piso circundante a la fuente por ser el sector más deteriorado, la reparación a nuevo de toda la instalación eléctrica, recuperándose el sistema de bombeo, y la reposición de faltantes de venecitas (mosaico veneciano).


A su vez se repararán senderos y veredas, se unificaran y ampliarán las bases de los arbolados y, algo que resolverá muchos problemas, quedara bajo tierra en su totalidad el sistema eléctrico para potenciar la iluminación y renovar el cableado, descargas a tierra y el correspondiente sistema de protección, colocándose, finalmente luminarias con sistema LED. Para optimizar el uso del recurso hídrico, se construirá un sistema de riego con aspersores e irrigación automatizada.


Finalmente los canteros y senderos serán embellecidos con diversas variedades florales acordes con el lugar. Estos trabajos acaban de comenzar, finalizarán probablemente antes de Navidad, pero mientras se realicen las obras, en ningún momento quedará cerrada la plaza sino que se trabajará por sectores o cuartos.


Un ícono de San Juan

La plaza 25 de Mayo es la cara de San Juan al mundo. Es de destacar la restauración que se lleva a cabo. A eso hay que sumarle todo lo necesario para disfrutarla y cuidarla por todos los sanjuaninos y sus instituciones. Más árboles autóctonos, flores y lo que brinde colorido, paz y tranquilidad para quienes paseen por el lugar. También tomar medidas pertinentes para que ninguna persona u organizaciones de personas destruyan este patrimonio histórico de la provincia cuando se trata de festejos deportivos provinciales y nacionales o bien cuando se trata de protestas de cualquier tipo. Esta plaza, es de todos los sanjuaninos y es un orgullo ver cuando los turistas se sacan fotos en este lugar. Imágenes que perpetuarán su visita a nuestra provincia.


 Luis Eduardo Meglioli
 Periodista. Presidente del Consejo Fundador de Patrimonio Cultural y Natural de SJ.
 Fuentes: "Retablo sanjuanino", Horacio Videla; "Lugares Históricos de San Juan", César H. Guerrero; "Duendes del Arenal", María del C. Reverendo, "San Juan, la Ciudad y el Oasis", Dora Roitman, UNSJ, 1996.