La desocupación bajó en el segundo trimestre hasta 9,6% y mejoró en relación con ese mismo tramo del 2020, en el peor momento de la pandemia, cuando el índice de desempleo abierto había alcanzado al 13,1% de la población económicamente activa, informó este jueves el Indec.

En los primeros tres meses del año la evolución del mercado laboral había registado una mejora entre el 11% con el que cerró el 2020 hasta 10,2%, por los meses de evolución en la actividad económica tras el primer impacto de la cuarentena y la crisis sanitaria.

Los datos oficiales registran 1,3 millones de argentinos desocupados y muestran que la recuperación de la economía avanza más rápido que la generación de puestos de trabajo. En el último año la economía reincorporó a solo el 54% de los trabajadores formales del sector privado que perdieron su empleo durante los meses de cuarentena más estricta.

Según se desprende de cifras difundidas por el Ministerio de Trabajo, en el tramo de marzo y julio de 2020, cuando las medidas de aislamiento social fueron más duras, se perdieron 191 mil empleos privados. En los doce meses posteriores, es decir hasta junio de 2021, el último dato oficial, se recompusieron unos 103 mil puestos de trabajo.

Seis sectores emplean actualmente más personas que antes de la crisis sanitaria: Pesca 4,6%, Actividades inmobiliarias, de alquiler y empresariales 3,4%, Industria manufacturera 2,1%, Salud 1,5%, Suministro de electricidad, gas y agua 0,7% y Agricultura, ganadería, caza y silvicultura 0,2 por ciento.

Por el contrario, hay otros rubros de la economía en que la situación laboral permanece considerablemente más dañada. En ese grupo se ubican, por ejemplo, Hoteles y restaurantes (-22,2%), Servicios comunitarios, sociales y personales (-4,7%), Construcción (-4,6%) y Explotación de minas y canteras (-3,8%), entre otros.

Un informe oficial realizado por el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales que mide la “pobreza multidimensional” (con aspectos adicionales al monetario como la salud, educación, vivienda y trabajo), mostró que el 46% de las personas sufrieron algún tipo de dificultad. La principal es la dificultad de acceso al empleo que nada menos que se triplicó durante la pandemia, desde 6 a 18% de la población total.