El oficialismo auguró un año 2017 con una inflación en torno al 17%, cifra a partir de la cual se propone discutir las paritarias de los trabajadores, principal motor del consumo interno. Pero la estimación oficial es puesta en duda si se tiene en cuenta la remarcación de precios, principalmente, los que hacen a artículos de primera necesidad.
 

Tal es el caso del pan, que esta semana pasó a costar cerca de $ 50 el kilo, luego de una suba de 15%. Según la Federación Industrial Panaderil de la provincia de Buenos Aires, la suba responde a un aumento en el costo de la materia prima: según estiman en el sector, la harina aumentará un 12% en los próximos días, y un 10% más en el mes de abril, que se suman al incremento del 16,8% que tuvo el producto durante 2016.
 

Según un relevamiento de precios de la consultora Ecolatina, a enero de 2017, el kilo de pan francés aumentó un 33,7% interanual. Teniendo en cuenta la suba de febrero, el aumento fue del 70% interanual.
 

Pero no sería el único producto de primera necesidad que muestra un alza de ese nivel. Tal es el caso del aceite de girasol, que entre enero de 2016 a enero de 2017, registró un alza del 136,1%.
 

Vale recordar que, debido al incremento del aceite durante los primeros meses del año pasado (en julio de 2016 ya tocaba el 80%), el Gobierno tuvo que acordar topes mensuales con el sector aceitero, de entre el 4% al 6%.