Adverso. El clima no estuvo este año al lado de los productores de tomate para industria y por eso los rendimientos fueron inferiores.

Con dificultades porque esta temporada bajaron los rendimientos por factores climáticos y en medio de la crisis que vive en general el sector agroindustrial por la escalada inflacionaria, los productores de tomate para industria están preocupados por los bajos precios que les están pagando. Al punto que hablan de reducir la plantación del cultivo para la próxima temporada.

Es porque el valor histórico que recibieron fue de 10 centavos de dólar y este año apenas si les están abonando 7,5 centavos de la misma moneda.

El sector industrial es el que fija las reglas de juego y contra eso los productores sostienen que es difícil negociar. Encima, cuando los tomateros sanjuaninos venían de temporadas con muy buenos rendimientos, superiores incluso a los 100.000 kilos por hectárea, este año los promedios llegaron a los 85.000 kilos por hectárea. La razón fue el factor climático, por ejemplo fuertes vientos en la época de floración, lluvias en enero y los cambios de temperatura, con días de temperaturas muy altas y después bajaba.


Gonzalo López, productor de Médano de Oro, en Rawson, dijo que “hemos trabajado por lo comido, como dice el refrán, y por eso voy a plantar la mitad de lo que planté este año, que fueron 15 hectáreas”. Para explicar su situación contó que producir una hectárea de tomate, contabilizando los gastos de plantines, guano, fertilizantes, preparación del suelo y la cosecha, cuesta unos 250.000 pesos y a 3 pesos, el equivalente a los 7,5 centavos de dólar, recibirá 270.000 pesos, con lo cual la ganancia es ínfima.

José Luis Martín, productor de Pocito, manifestó su preocupación por la baja de los rendimientos y agregó que el precio que reciben no es de contado, sino en cuotas y con la inflación existente se les reduce el monto que perciben. También dijo que va a analizar qué va a hacer para la próxima temporada.
Desde la Asociación Tomate 2000, entidad que nuclea a buena parte de los productores de San Juan, Mendoza y La Rioja, Guillermo Quiroga sostuvo que cuando se esperaba una temporada con rendimientos superiores el clima les jugó en contra y han sido inferiores. Este tema también lo reconoció el secretario de Agricultura, Ariel Lucero.

Los problemas en el sector se manifiestan cuando está próximo a comenzar el VI Encuentro Argentino del Tomate (ver aparte) y cuando en la reunión anterior se apostaba a ampliar la superficie cultivada.
Según datos del sector, esta temporada se cultivaron 5.541 hectáreas, de las cuales 4.000 se reparten entre San Juan y Mendoza, con la misma cantidad cada provincia.

En San Juan se cosecharon unos 160 millones de kilos, el 40% de la producción nacional de unos 400 millones de kilos. Y tiene los mayores rendimientos del país, con la obtención de unas 85 toneladas por hectárea, aunque inferior a años anteriores. El problema es que ese volumen no puede ser procesado en San Juan porque no hay suficiente capacidad instalada. Como máximo se pueden llegar a procesar unos 110 millones de kilos y el resto va a Mendoza.