A principios de año se conocieron los primeros síntomas de una fuerte puja entre sectores empresarios sanjuaninos tradicionales y nuevos en el seno de la Federación Económica de San Juan, y si bien lo que siguió fue una aparente calma, ahora se conoció que el grupo disconforme pasó meses armando una ingeniería y planteando estrategias para dar nacimiento a una nueva entidad: la Asociación de Empresarios y Profesionales de San Juan, cobija a 14 de las entidades más poderosas de la economía local y será presentada oficialmente al Gobierno en los próximos días, una vez que terminen todas las asunciones y Gioja pueda recibirlos en la Gobernación, según informaron fuentes del sector. Por ahora nadie quiere salir a hablar en voz alta hasta tanto obtengan la "bendición" del Gobierno que oficialice al grupo.

Sus asociados provienen del sector minero, industrial, tecnológico, de la construcción, el agro, comercio y turismo; y esgrimen como principal argumento que con sus actividades contribuyen al 75% del Producto Bruto Geográfico de la provincia. Ya eligieron autoridades y está presidida por Fernando Suárez, de la Cámara Argentina de la Construcción, además de tres vicepresidencias que recayeron en representantes del Colegio de Arquitectos, Cámara de Servicios Mineros (Casemi) y Centro Comercial de San Juan. El resto de la Asociación está integrado por Casetic, Unión Industrial y sus jóvenes de Unaje, transportistas de Uprocam, Cámara Minera, Federación Agraria, Consejo Profesional Técnico, Centro de Ingenieros, Cámara de Bodegueros y Cámara de Turismo.

Sus integrantes rechazan rotundamente plantear el nacimiento del nuevo grupo como una fractura de la tradicional Federación Económica de San Juan, algo difícil de disimular en la práctica cuando los nuevos dirigentes han definido todo un ciclo de trabajo que incluye hasta los lineamientos de un plan estratégico 2030 para la provincia; algo que indudablemente no pudieron llevar adelante bajo el paraguas de la federación. El conflicto es de vieja data: a principios de año se hizo público el malestar de un sector dentro de la federación que reclamaba espacios de poder y renovación de las filas (ver aparte), pero hubo cambio de autoridades y asumió Rubén Carrión, de las agencias de Loterías y afines, hombre de las mismas filas de la conducción anterior que lideró el farmacéutico Carlos Otto. Si bien la entidad madre de los empresarios intentó sumarlos, la fractura no se logró evitar, aunque no se quiera hablar de ello. "Esto no es confrontar con nadie, sólo buscamos respetar individualidades y consolidar un crecimiento de la economía provincial en forma sostenible", dijo un peso pesado de la nueva entidad. "No hay enfrentamientos, nosotros no queremos confrontar estamos en un estadio superior, somos una entidad de tercer grado y de hecho, la Federación Económica también firmó el acta de integración de esta asociación",aseguró otro de los empresarios enrolados en la nueva asociación. DIARIO DE CUYO no logró contactar durante el fin de semana largo a Carrión o a Otto, de la Federación, para consultarles sobre este punto.