Apenas salido del horno, el Plan Estratégico Vitivinícola (Pevi) 2030 presentado ayer por la Corporación Vitivinícola Argentina ante los ojos del presidente Alberto Fernández en Mendoza, ya cosechó críticas en San Juan. Los referentes de las principales entidades vitivinícolas cuestionaron por insuficientes tanto las metas de consumo interno y de exportaciones que el sector quiere lograr en 10 años, como también la poca representatividad lograda en su armado, puesto que reclaman que no estuvieron presentes todas las bodegas y viñateros. Era previsible esa reacción porque en San Juan, la mayoría de las entidades vitivinícolas le han dado la espalda a la Coviar. Incluso el viernes se conoció que se sumaron a la nueva Mesa Nacional Vitivinícola (ver aparte), integrada por 8 entidades. El nuevo Pevi que se oficializó ayer quiere para el 2030 incrementar el consumo domestico a 1.000 millones de litros, y alcanzar exportaciones por U$S 1.380 millones. A algunos esos números le parecen poco. Es el caso de Pablo Martín, de la Mesa Vitícola, que se sumó a la otra entidad vitivinícola. "Respecto al consumo interno de vino no es ninguna locura en pensar en los mil millones de litros anuales en 10 años cuando hoy estamos teniendo un consumo de casi 80 millones de litros mensuales, o sea, unos 900 millones de litros en el 2020", dijo y agregó "me parece una meta un poco baja". Respecto a las exportaciones, dijo que están estrechamente ligadas a la macroeconomía, como para plantearse un objetivo a ese año. "No critico a la Coviar que se fije objetivos, pero sí que no explique cómo llegar a esos niveles de consumo interno o de exportaciones", indicó. Por su parte, Juan José Ramos, desde la Asociación de Viñateros Independientes, también objetó los lineamientos del plan sobre todo en lo relativo al consumo interno. "Para lograr esos objetivos de consumo no hace falta promocionar nada porque este último año se ha consumido unos 900 millones de litros. Solo con el aumento de la población se debe lograr ese objetivo. Es entonces poco auspicioso", criticó. Aprovechó la oportunidad para reprochar a la Coviar que durante sus 17 años de vigencia se perdieron más de 300 millones de litros anuales de consumo. "En cuanto a las exportaciones se puede lograr mucho mas pero esta sujeto a las políticas cambiarias impositivas y sobre todo de la rentabilidad de toda la cadena, empezando por el viñateros", objetó. Eduardo Garces, de la Federación Viñatera, dijo que es posible, "pero sin la Coviar" a quien también recriminó haber dejado caer de 33 a 18 litros per cápita el consumo, y no cumplir la meta de U$S 2000 millones en exportaciones. Mario Pulenta, de la Cámara Bodeguera, evitó opinar hasta que las bodegas analicen "los detalles del plan presentado". Pero desde el sector industrial arreciaron las críticas. No objetan las cifras planteadas como meta, pero sí la forma en que se procedió a elaborar un plan donde prácticamente no hubo participación de una buena porción de bodegas del país. "La Coviar es un grupo de personas que deciden lo que hay que hacer y no quieren escuchar más opiniones que las propias", dijo un conocido empresario. Por su parte, Angel Leotta, expresidente y actual integrante de la Coviar destacó la posibilidad de alcanzar los números previstos de comercialización hacia el 2030, pero abrió el paraguas atándolo a las condiciones macroeconómicas del país. "Dependerá de muchos factores, se puede planificar y tomar todos los recaudos del caso pero si la marcha de la economía del país no acompaña, no hay plan ni programa que valga", indicó. "No depende de quienes implementen el plan sino de quienes manejen el país", dijo.

La nueva entidad

El jueves pasado se anunció la creación de una Mesa Nacional Vitivinícola, por fuera de la Coviar; integrada por ocho entidades, con el objetivo de "trabajar en conjunto para que el sector en su totalidad contribuya al desarrollo económico y social sostenible del país".

Mercado interno

940 millones de litros se vendieron en el mercado doméstico durante el 2020, lo que marcó el volumen más alto de los últimos 5 años.

Las exportaciones

Los valores de exportación de vino fraccionado cerraron en 201,8 millones de litros durante el 2020 y U$S 705 millones. Un año antes, en 2019, las exportaciones vitivinícolas (incluyendo todos los productos) fueron de más de 1.000 millones de dólares.

Lo que plantea el sector a 10 años


Si se miran los números del Pevi 2030 diseñado por Coviar, la meta en 2030 para el mercado doméstico interno es de 1.000 millones de litros (no se especifica valor monetario).

Para exportaciones se quiere llegar a vender al mundo unos 250 millones de litros de fraccionado (U$S 1.000 millones), 150 millones de litros a granel (U$S 100 millones) y 150 mil toneladas de mosto (U$S 150 millones). También aspiran a exportar 50 mil toneladas de pasas de uva (U$S 100 millones) y 15 mil toneladas de uva de mesa ( U$S 30 millones). En total se buscan alcanzar ventas por U$S 1.380 millones.