El proyecto de cobre Josemaría, que se ubica en el departamento Iglesia, es el “nuevo Veladero”, porque se trata del yacimiento que por su tamaña se prevé tenga un impacto similar al que se emplaza en ese mismo distrito y que está en producción desde el 2005.

Se sabe que el impacto que tendrá es mayúsculo y es por eso que las empresas de la zona de influencia quieren, desde ya, posicionarse. Pero el vínculo entre DEPROMINSA, la empresa que lleva adelante Josemaría, y los proveedores viene en el último tiempo con algunos cortocircuitos. Es por eso que este martes, en una reunión que duró casi 3 horas y que encabezó el ministro de Minería, Carlos Astudillo, representantes de la minera y de la Cámara de Prestadores Mineros de Iglesia.

De acuerdo a lo que contó Astudillo a este diario, la empresa tiene el 34% de sus contratos en manos de prestadores de ese departamento y que trabajarán de ahora en más para mejorar ese número y tratar de sumar aquellos que están en mano de foráneos (son el 17% del total).

“La DIA (Declaración de Impacto Ambiental) de exploración lo vienen cumpliendo pero, independientemente de eso, siempre planteamos que hay oportunidad de mejora”, explicó el jefe de la cartera provincial de Minería.

DEPROMINSA se comprometió para el 17 de noviembre a mostrarle a los proveedores de Iglesia aquellos contratos que hoy están en manos de empresas de otras provincias y ver cuáles pueden recaer en iglesianos. En el fondo, la queja de las firmas departamentales es que quedaron en su mayoría marginadas del gran negocio que representa Veladero y no quieren que el tren les pase de nuevo por delante con Josemaría.

Vale recordar que este yacimiento cuprífero ya presentó la Declaración de Impacto Ambiental para explotar y que su puesta en marcha demandará miles de puestos de trabajos directos, otro tanto indirectos y un desarrollo importante de proveedores.

Para construir la mina, Josemaría calcula que necesitará unos 3.090 millones de dólares. El proyecto cuenta con recursos por 6,7 millones de libras de cobre, 7,0 millones de onzas de oro y 31 millones de onzas de plata. La vida útil del yacimiento ha sido estimada en 19 años.