Representantes de la Cámara argentina de fabricantes y exportadores de jugo de uva se reunieron hace unos días con Uñac y le plantearon los precios que pagará el sector.

Las declaraciones del gobernador Sergio Uñac en torno a que el piso de la uva común para esta cosecha debe arrancar en $4,50, según formuló el miércoles a DIARIO DE CUYO, causó ayer gran revuelo en el ambiente vitivinícola. Por un lado, los jugadores del sector industrial, que son los que comprarán las uvas, aseguran que ese valor es muy alto para la materia prima y que las condiciones del mercado actual ‘no dan’ para pagar más que una banda de precios que oscila entre los 3,80 a 4 pesos. En la vereda opuesta, la de los productores, hay dos bandos bien definidos. Un sector conformado por las entidades tradicionales sanjuaninas que tampoco están conformes con el precio oficial, pero porque al revés de los industriales, lo consideran muy bajo e insuficiente para afrontar los costos de energía y combustible con fuertes aumentos esta temporada. Aquí se enrolan la Asociación de Viñateros Independientes y la Federación de Viñateros. En cambio el precio de base de $4,50 se ganó el apoyo del ala viñatera de la Cámara de Producción, Empaque y Comercio de Pocito (CPEC) y de la Cámara de Productores Vitícolas (Caprovit). 
 

VIÑATEROS DIVIDIDOS

Los referentes del sector primario dijeron hace un mes que el precio ideal para esta cosecha es de 7 pesos por kilo de la común, y el valor de $4,50 del que habló el gobernador les cayó como un balde de agua fría.

En la Federación de Viñateros que conduce Eduardo Garcés dijeron que el valor fue "inesperado" y ""un poco bajo". Pese a que es un 50% más que el precio que se pagó el año pasado, el dirigente explicó que sus asociados ayer le reclamaron que no va a compensar las pérdidas que ha sufrido el sector en los últimos años, más ahora que se han encarecido los costos de combustible y de energía, que impactan fuerte en viñedos con riego por goteo, cuando el vino en góndola sigue subiendo. Cuestionamientos similares se difundieron desde la AVI -que timonea Juan José Ramos- donde insistieron en que con 4,50 ""no se afrontan los costos de producción con los aumentos de la tarifa y el combustible". Agregaron que este año los productores no podrán compensar un valor bajo de las uvas comunes, vendiendo más caro a las uvas finas, porque éstas últimas ""parece que tendrán un valor similar o inferior al del año pasado". Ramos agregó la queja de que los adelantos de cosecha que están ofreciendo las bodegas son insuficientes para los productores que no están alcanzados por el crédito extrabancario de cosecha y acarreo que ofreció el gobierno esta temporada. Pablo Martín, la voz viñatera de CPEC, en cambio consideró "correcto" el valor que dijo Uñac y coincidió en que subirá porque habrá menos uvas por efecto de la podredumbre a causa del clima, porque cesarán las importaciones de vino chileno; y por el faltante de vinos y mostos a nivel mundial a raíz de las malas cosechas en Europa y EEUU. Sobre la importación destacó que el vino a granel chileno cuyos grandes volúmenes importados el año pasado hicieron caer los precios, ahora se ha encarecido al sobrevaluarse el peso chileno, a la vez que se devaluó el argentino. José Molina, que dirige Caprovit, señaló que $4,50 "es la realidad del mercado" para uvas comunes y mosteras porque tanto el actual tipo de cambio como el valor internacional del mosto "están permitiendo ese valor". Agregó que están ""conformes" pero abogó porque el plazo de pago de bodegas sea corto.

En las bodegas

3,80

de mínima y 4 pesos de máxima es el precio que las bodegas están ofreciendo actualmente al productor por kilo de uva Cereza, según los viñateros, a pagar en cuotas desde junio (en Fecovita) y desde julio (en Peñaflor).

LA INDUSTRIA

El sector mostero es el único que ayer se animó a cuestionar en voz alta el valor indicado oficialmente para la uva. Fernando Morales, presidente de la Cámara del mosto, dijo que le transmitió a Uñac en una reunión hace unos días que el precio que el sector está dispuesto a pagar este año es entre $3,80 y $4 ""básicamente porque los precios de la exportación del mosto así lo indican". Las grandes formadores de precios -Fecovita y Peñaflor- no quisieron opinar pero hubo malestar. Fuentes de Fecovita dijeron que al valor de la uva "sólo lo establece el mercado", en franca crítica a los dichos de Uñac.