El problema de los basureros a cielo abierto crece en nuestra provincia, en la medida que las comunas no están dando respuesta a la tarea de recolectar estos residuos, que son arrojados impunemente por personas que no acatan las normas que prohiben esta práctica. Este fenómeno provocó la semana pasada un enfrentamiento de vecinos en una villa de Caucete, donde la basura acumulada ocasionaba numerosos inconvenientes. 


Es un hecho que la basura arrojada en la vía pública no sigue el mismo camino de los residuos domiciliarios, ya que al no ser recolectada por los municipios, no llegar con la misma regularidad a las plantas de tratamiento, recuperación y disposición final ubicadas en distintas zonas de la provincia. Un replanteo del proceso de recolección por parte de las comunas, que se desentienden de este problema, ayudaría a combatir este mal, justificando el sistema de saneamiento con el que cuenta la provincia, único en su tipo en todo el país. 


En los basureros a cielo abierto se puede encontrar desde desechos de alimentos hasta animales muertos, plásticos o prendas de vestir, lo que los convierte en focos de contaminación ambiental que afectan a varios kilómetros a la redonda. 


Hay basureros tanto en las zonas urbanas como en las rurales que afectan de distintas formas a los vecinos. En los primeros, además de la contaminación ambiental posibilitan la proliferación de roedores que luego ingresan a las viviendas. Mientras que en la zona rural la basura acumulada en desagües o a orillas de las calles se convierten en focos infecciosos para los niños que acostumbran a jugar en las inmediaciones. 


El programa de tratamiento de residuos domiciliarios que comenzó a funcionar en nuestra provincia entre 2011 y 2015, consistió en la habilitación de 9 plantas de tratamiento de residuos sólidos domiciliarios ubicadas en 9 regiones distintas. Hasta ahora el sistema está funcionando dentro de lo previsto, a excepción de ciertas plantas que, en la opinión de algunos actores comunitarios, no están siendo aprovechadas en su real dimensión. 


Solucionar el problema de la basura en la vía pública surge como una necesidad para los organismos correspondientes, empeñados en demostrar que el sistema implementado en la provincia es capaz de controlar este fenómeno en una forma efectiva y absoluta.