Los sistemas informáticos que dominan el quehacer diario, como sustento de la globalización de la humanidad, se perfeccionan y avanzan permanentemente haciendo cada vez más dependiente nuestra existencia de los teclados, pantallas y demás aparatos de la era digital. Pero el ciberespacio está lejos de cubrirse con los servicios de la comunicación y de las herramientas para el desarrollo sustentable de los pueblos mediante la diversidad lingüística y cultural.


La última denuncia sobre esta marginalidad la planteó la periodista africana de origen beninés, Sinatou A. Saka, al señalar que sólo diez lenguas monopolizan el 80% del espacio digital y casi todas son lenguas occidentales, por lo tanto todo idioma que no esté presente en Internet terminará desapareciendo en pocos años al ser desplazado por la memoria global.


Es que hay más de 2.000 lenguas en África y si bien algunas llegan a la web, ni Google, Microsoft u otras compañías tecnológicas se interesan por rescatarlas. 


Sólo Wikipedia es la estructura del conocimiento que más preocupación ha manifestado por mantener viva la producción de contenidos en lenguas africanas. 


Se estima que prácticamente uno de cada dos africanos, unos 650 millones de personas, están excluidos de las tecnologías de la información y la comunicación, indica el informe.
El problema africano pluringüístico y cultural no se limita a los proveedores de Internet sino
que los diferentes países del continente tampoco presionan para contar con la red global. Los parlamentos y los gobiernos deberían instalar una web institucional de manera que los actos oficiales, protocolares y administrativos se formulen en lenguas africanas y no en inglés o francés como es la práctica actual. Sería una forma de generar contenidos y poner en valor las lenguas regionales para ingresar en la dinámica de Internet.


Como ha señalado la Unesco, cada vez más la información y el conocimiento se vuelven elementos clave en la creación de la riqueza, la transformación social y el desarrollo humano. La herramienta principal para transmitir la información y el conocimiento es el lenguaje, y de esta manera, la posibilidad de usar la lengua materna en las redes sociales es una forma de determinar el grado de interacción con las sociedades del conocimiento emergentes.


En teoría, Internet está abierto a todos los idiomas del mundo, aunque la realidad muestra que primero se deben cumplir con las condiciones técnicas, financieras y los recursos humanos indispensables.