Siempre nos hemos quejado de que en la vida diaria hay una serie de trámites o gestiones que están demás y que deberían ser eliminados para facilitar el desarrollo normal de las actividades y desalentar la burocracia estatal que, en ocasiones, llega a situaciones descabelladas. 


Mediante la redes sociales se lanzó la pregunta destinada a establecer cuáles eran los 10 trámites más inútiles que realizan los argentinos. Al término de la encuesta se conformó un listado de trámites que fue tomado por un diputado de la oposición, Martín Tetaz, para promover una iniciativa legislativa para eliminarlos. 


Se conoce que en la Argentina la burocracia estatal es culpable de una serie de inconvenientes a la hora de realizar trámites, ya sea personales o para una organización o empresas. La gran cantidad de obstáculos que es necesario sortear para completar una gestión suele llevar semanas, meses o años, según el ámbito estatal en el que toque realizar el trámite. En nuestra provincia hay algunas reparticiones vinculadas a la actividad comercial, la industria, el sistema previsional, la salud pública o la educación, que suelen presentar algunos trámites tan engorrosos que, en ocasiones hay que buscar gestores o abogados para que los realicen con más solvencia. Como para citar un ejemplo, en el Ministerio de Educación hay un trámite por liquidación de haberes adeudados cuyo titular ha fallecido y que lleva casi dos años. Cuando se efectúe el pago se hará a valores históricos, no actualizados, por lo que además de la demora habrá una pérdida de valor considerable.


De la encuesta a través de las redes sociales, los 10 trámites más inútiles que votó la gente son los siguientes: Renovación del Registro de Discapacidad. Registro Automotor. Juicio Ordinario de Desalojo por Finalización de Contrato. Reempadronamiento de IOMA. Formulario y Pago para Elementos de Prevención. Fe de vida (Anses). Actas de Defunción y Nacimiento Actualizadas. VTV. Exámenes para Renovar el Registro y Fotocopias para trámites. Esto último es lo más común y lo más requerido, colocando muchas veces al ciudadano en una situación incómoda y engorrosa cuando no tiene cerca una fotocopiadora o un centro de copiado. 


Más allá de la iniciativa legislativa está haciendo falta que los gobiernos nacional, provinciales y municipales se sinceren en sus requerimientos y hagan una revisión de todos los trámites que exigen habitualmente para simplificar las acciones. En definitiva, para hacer más sencillo el funcionamiento del Estado que es lo que ayudará a ahorrar tiempo y dinero en la concreción de trámites que podrían ser mucho menos complicados y demandantes para los ciudadanos.