Durante el período 2016-2017, el sector agroindustrial de nuestro país asistió a la apertura de más de 100 nuevos mercados en todo el mundo, cifra que se espera seguir ampliando en base al potencial que tiene el campo argentino. Estos valores son los que llevan a las autoridades y a los actores de este sector de la producción a creer que en poco tiempo más la Argentina puede llegar a convertirse, en lo que han coincidido en llamar "el supermercado del mundo'', por la capacidad que tiene nuestro campo de producir alimentos en base a la calidad de suelos y el avance tecnológico.


Precisamente, durante la última Expoagro realizada en marzo pasado, una comitiva del G20 se hizo presente en este evento para interiorizarse sobre el potencial del campo argentino y conocer en detalle la forma en que se está trabajando, a fin de tomarla de modelo para exponerla en la Cumbre.


Cabe recordar que el G20 es el principal foro internacional para la cooperación económica, financiera y política, destinado a abordar los grandes desafíos globales y generar las políticas públicas que los resuelvan. Este año, entre noviembre y diciembre, la Argentina será sede por primera vez de una Cumbre del G20, en el que participa la Unión Europea más 19 países. Uno de los temas a tratarse es el de la necesidad de aumentar la producción de alimentos sanos y nutritivos de forma sostenible. Es por ello que el tema central del área de agricultura será el manejo integral y responsable del suelo.


Lo que se busca es contar con suelos sanos para la demanda de la agricultura global, teniendo en cuenta que son recursos limitados, por lo que los gobiernos deben abordar este tema en una forma muy responsable.


Hay otro aspecto que interesa mucho a las naciones que se darán cita en el G20 y es que los suelos colaboran con la regulación del clima porque constituyen un importante almacén de carbono, lo que contribuye a balancear las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero.


Se espera que en la Cumbre de Buenos Aires, los máximos responsables de las carteras agrícolas pongan en consideración los desafíos que se enfrentan en la actualidad para lograr la meta de alimentar al mundo mediante una agricultura moderna, competitiva y sustentable.