El anuncio de que el Gobierno provincial se hará cargo de cubrir posibles daños agrícolas producidos por fenómenos meteorológicos o contingencias climáticas, mediante un fondo de ocho millones de pesos, ha traído cierto alivio a los productores que hasta ahora se encontraban desprotegidos, por no haberse contratado ningún seguro agrícola que pusiera a resguardo las inversiones y esfuerzos realizado en cada una de las fincas, en un año tan complicado como el presente. 


El fondo disponible para cubrir daños en el sector agrícola, que pueden ir desde una helada tardía, hasta la caída de granizo o los efectos de la sequía -que esta temporada es muy probable que se observen-, estará administrado directamente por el Ministerio de la Producción, que también acaba de anunciar que dispone de otros fondos para otros programas complementarios que estarán disponibles en ayuda del sector agrícola. Dentro de ese paquete figuran los fondos destinados al Programa de Control y Erradicación de Lobesia Botrana, una plaga que preocupa mucho a los viñateros porque cada vez provoca mayores pérdidas económicas. También fue anuncia la finalización de los trabajos destinados a la instalación de 40 estaciones agrometeorológicas en diversos departamento agrícolas, que serán de gran ayuda para promover nuevas plantaciones con mayor índice de efectividad respecto al éxito de los cultivos y a los volúmenes de producción, al poder observar y predecir el comportamiento del clima. 


El tema del seguro agrícola siempre ha sido motivo de debate en la provincia desde la época en que esta tarea estaba a cargo del Consejo de Protección a la Producción Agrícola (CPPA) o del Agro-vitícola, organismos de conformación mixta en Sociedad con el Estado; o de entidades crediticias como el Banco San Juan o los seguros del Banco Nación, una de las últimas entidades que estuvo a cargo de esta tarea. 


Conforme a lo revelado por las autoridades del Ministerio de la Producción, con el manejo directo de los fondos habrá un ahorro sustancial para el Estado, ya que de los 8 millones asignados para asegurar la producción agraria local, el año pasado tan sólo se liquidaron en concepto de resarcimiento por daños un poco más de 1.100.000 pesos. De todas formas el Estado provincial estará cubierto ante posibles contingencias mayores por un fondo nacional al que es posible recurrir en caso de que el fondo previsto por la provincia no alcance para cubrir un daño que pueda ser general y con características de pérdidas totales. Con este nivel de reaseguro existe cierta tranquilidad de que el nuevo sistema no tendrá mayores inconvenientes, que es lo que todo el sector agrario productivo de la provincia espera que ocurra.