Rosario Central y Newell’s es uno de los clásicos más populares del fútbol. Cada vez que juegan se genera una gran expectativa cada hinchada busca resaltar. Esta vez, un drone ingresó a los pocos minutos de haber iniciado el partido y este debió ser interrumpido. El hecho generó la ira del Pablo Pérez, quien reaccionó destruyendo el dispositivo.

A los dos minutos de haber iniciado el partido, el árbitro Fernando Echenique decidió parar todo debido a un curioso hecho. Luego de un córner a favor de Rosario Central, un drone ingresó a la cancha con una bandera donde se burlaban de Newell’s.

Sobre una bandera de color amarilla y azul, se leía: “Pecho frío, hijo mío, de palomita nos abandonaste”. De esa manera, el drone empezó a sobrevolar cerca de los jugadores y para sorpresa de todos, el partido debió ser interrumpido para evitar la dispersión o imposibilidad de continuar con el partido.

Mientras el drone volaba cerca de los jugadores, Lucas Gamboa logró atrapar el dispositivo y lo dejó a un costado de la cancha. Sin embargo, fue en ese momento dónde Pablo Pérez se acercó y reaccionó con gran violencia. Sin dudarlo, lo pisó con fuerza hasta romperlo y luego le arrojó la pelota para terminar de destruirlo.

De esa manera, Pablo Pérez rompió el drone que era manejado por fuera del estadio y que buscaba burlarse de Newell’s. Si bien la actitud del jugador pudo haber implicado una tarjeta amarilla, lo cierto es que no fue sancionado por el árbitro quien a los pocos minutos retomó el partido.

Tras retomarse el partido, Rosario Central terminó venciendo 3-0 a Newell’s Old Boys y ahora espera enfrentarse a Platense y queda más cerca de avanzar hacia los cuartos de final de la Copa de la Liga. Durante el partido disputado en el estadio Gigante de Arroyito los goles fueron realizados por Marco Rubén, Nicolás Ferreyra y Luca Martínez Dupuy.