Vecinos de la ciudad colombiana de Cartagena se sorprendieron con la conmovedora escena de una perra paseando a un mono capuchino en su lomo.

Los residentes del barrio de Olaya Herrera se enternecieron aún más cuando observaron que la perra, que había tenido cachorros unas semanas antes, también amamantó al simio.

Creen que el mono fue abandonado en el lugar por personas que lo sacaron de su hábitat natural.

Expertos aconsejaron no separar al "cachorro adoptivo" de la perra.

Posted by Tlcosta Cartagena on viernes, 16 de febrero de 2018

Agentes de la Policía Ambiental y Ecológica de Cartagena quisieron llevar al mono a otro lugar de cuidado, pero el intento de separación generó fuertes reacciones de defensa de parte de los dos animales.

En consecuencia, las autoridades decidieron reubicarlos en un sitio donde ambos estuvieran a salvo.

Según explicó Enrique Zerda, etólogo de la Universidad Nacional a la radio Caracol, el vínculo entablado entre la perra y el mono capuchino se llama impronta y es irreversible una vez que se produce en el cerebro de un animal.

De acuerdo con el especialista, el simio no sobreviviría la separación. Además, en la selva podría ser rechazado por su propia especie.