De izquierda a derecha: Pablo Espósito (26) es el jinete suplente; José Hernández (37) compite en crina limpia; Franco Cornejo (26) domará en gurupa sureña; y José Cepeda (27) en bastos con encimera.


Como todos los veranos, los sueños del gauchaje sanjuanino se renuevan ante el advenimiento de la nueva edición (la número 54) del Festival Mayor de Doma y Folklore de Jesús María -del 11 al 23 de enero en la localidad homónima cordobesa- y en esta oportunidad la delegación provincial buscará mejorar su performance después de haber quedado en el puesto 13 en la tabla general en la última participación de este año con un acumulado de 118 puntos globales. Sin embargo, la principal motivación por competir para el equipo comandado por Ramón Guardia y Jorge Alcaide es la de salir campeón con la fuerza impulsada, esta vez, por el cuerpo de jinetes dispuestos a pisar firmes el campo de la doma. Aunque ya tengan experiencias en ediciones anteriores con resultados dispares, los cuatro jinetes sanjuaninos elegidos para representar a la paisanada local irán por primera vez juntos para pelear los primeros puestos. Ellos son José Cepeda (27) de Rawson que participará en la categoría bastos con encimera; José Hernández de Santa Lucía (37) en crina limpia; Franco Cornejo (26) de Santa Lucía en gurupa sureña; y Pablo Espósito (26) de Rawson quien será el suplente y cuya función será la de reforzar en los tres puestos a los titulares según se lo requiera a lo largo del certamen.

Como en 2016, José Martí había logrado la enorme hazaña de haberse consagrado campeón y haber dejado en alto a San Juan en el panteón nacional, la plaza local adquirió reputación de que los jinetes cuyanos son duros competidores. Sin embargo, para sostener los laureles hay que demostrar de qué están hechos los gauchos locales. El cuarteto de jóvenes está dispuesto a dar pelea en la pista. Durante este 2018, los jinetes se prepararon con mucho sacrificio en diferentes certámenes locales y regionales.

"San Juan no es ciudad para vivir de la jineteada. Es un hobby en comparación con otras provincias"

José Hernández

Pero la preparación no sólo implica montar asiduamente, o tener habilidades y destrezas desarrolladas; también, hay que tener en cuenta el entrenamiento físico y mental: "En mi caso -contó José Hernández- ejercito mucho, troto, hago bici y me cuido mucho la rodilla. Montar demanda mucho esfuerzo en piernas, brazos y caderas. No es lo mismo caerse al piso con o sin estado físico. Cada uno se prepara de acuerdo a lo que mejor le dé resultado. Por ejemplo, a mí no me sirve ir al gimnasio, porque me endurece el cuerpo, en vez de darme agilidad que eso es vital, a veces cualquier golpe o mal movimiento puede provocar lesiones".

Por su parte, Cornejo comentó que "depende de la categoría. En el caso de crina limpia, es importante fortalecer brazos, piernas y cadera. Pero por otro lado, hay que ver qué caballo te puede tocar para domar. Siempre hay que aprovechar al máximo las oportunidades que pueden salir en un sorteo, con la idea de aferrarte lo mejor posible al animal y aguantar tanto para no caerte".

La posibilidad de elegir animal está vedada en competencia. A cada jinete le toca por sorteo el caballo a domar, que por lo general provienen de las tropillas de Córdoba, La Pampa y Buenos Aires. Según cuentan el cuerpo de los reservados son más grandes de los que están en San Juan. Incluso, el equipamiento y vestimenta también son asignados según el orden que exista en la lista de competidores. "Montamos sin nuestras propias pilchas, no tenemos las mismas espuelas; tanto riendas como rebenques son diferentes a lo que estamos acostumbrados. Es como si en el automovilismo nos cambian de coche y de ropa en cada carrera", mencionó Hernández.

Mientras que Pablo Espósito opinó que al momento de existir ciertas ventajas entre los equipos, residen en aquellos que vienen de tener las clasificaciones regionales con muchos meses de anticipación, tiempo que les da para prepararse con más tranquilidad y llegar frescos a las fechas de enero. "Los equipos que siempre son favoritos son de Provincia de Buenos Aires, Capital, Córdoba, los brasileños y los uruguayos, también chilenos. Sin embargo, en los últimos años, el campeonato lo puede ganar cualquiera". Respecto a la alimentación, también los jóvenes sostienen que es esencial; sin embargo, mantener una dieta estricta es una misión imposible para ellos debido a que necesitan una dedicación exclusiva. "Cuidarse es difícil, porque no nos dedicamos a jinetear. Muchos nos mantenemos trabajando en otras actividades. Por eso, San Juan no es ciudad para vivir de la jineteada. Es un hobby en comparación con otras provincias", dijo el competidor de crina, mientras que Cepeda agregó: "Todos tenemos buen nivel. Los premios que podemos cobrar en Jesús María nos ayudan a sostenernos por un mes con ropa y comida. En cambio cuando competimos aquí, los premios sólo nos alcanzan para una docena de pasteles, la entrada y la nafta necesaria para trasladarnos".

Por último, Cornejo enfatizó que lo anímico es también un factor determinante. "Todos ya conocemos lo que es, volveremos a competir, a buscar la revancha. El que va a Jesús María, va con la idea de ser campeón, allá no se va a jugar. Algunas veces nos sale, otra no. Podemos matarnos las diez noches sin descansar, puede tocar un caballo malo o que lo superen al jinete. Pesan entre 500 a 600 kilos y hay que ir al choque, al final el cuerpo pasa factura. Pero todos vamos con la misma meta. En este deporte el que gana es el primero y se lleva todo".


> Para agendar

El Festival de Doma y Folklore de Jesús María comienza el 11 de enero. El día 9 la delegación sanjuanina viajará a la ciudad cordobesa y el día 10 tendrán que realizar el proceso de inscripción y acreditación. Después de la inauguración, la jineteada se desarrollará desde la tarde hasta la madrugada. Cuando se hagan los sorteos para la competencia, se sabrá si los jinetes entran en horario televisivo o no. Según el reglamento, si algunas de las 26 delegaciones terminan en los tres últimos puestos de la tabla general, quedan fuera de competencia para el año que viene.