El sábado 15 de enero, una usuaria de Twitter acusó a Luciana Salazar de teñirle el pelo a su hija Matilda hasta quemárselo.

Obviamente la actriz se indignó con este mensaje y, además de responderle a su seguidora, le inició acciones legales a Twitter y Google por difundir este mensaje y generar un potencial daño en la niña.

Hoy ganó el primer round en esta polémica. Luego de la gestión frente a la Justicia que hizo Luciana Salazar con su abogado -el Doctor Castro Bianchi- recibió una excelente noticia: en cuestión de días, Twitter suspendió la cuenta de la usuaria que emitió el polémico posteo que ostenta violencia verbal y psicológica contra la nena de 4 años.

A través de sus historias de Instagram, Luciana Salazar comentó: "Twitter suspendió temporalmente la cuenta que publicó barbaridades ofensivas sobre Matilda hasta que borrara el tuit. Twitter admite que lo que se decía violentaba y lastimaba los derechos de la menor. Lección también para los portales que replicaron algo tan desagradable". 

En una primera instancia, Luciana Salazar había respondido a la acusación con un mensaje en sus redes que decía: "La gente que no es feliz rompe muchos las pelotas". Sin embargo, luego decidió hacer una fuerte reflexión para proteger a Matilda. "No voy a permitir que me ataquen y mucho menos a mi hija. Las redes sociales tiene que ser un espacio de libre expresión respetando al otro y no una cloaca de odio. No se puede permitir que se agravie a las personas y mucho menos a menores de edad, con el enorme daño que eso genera", agregó indignada.