Buenos Aires, 11 de marzo- Agregó que su gobierno se solidariza con el pueblo japonés. "Daremos toda la asistencia necesaria y vamos a estar al lado de Japón en su reconstrucción", afirmó. Washington ya dispuso el envío de un portaaviones para que se suma a las tareas que encaran las autoridades niponas.

El anuncio de Barack Obama fue una respuesta positiva al pedido, realizado a primeras horas del día, por el país asiático de que se dispongan los 47 mil efectivos estadounidenses que se encuentran en el territorio nacional para colaborar con los trabajos de rescate.

En tanto, el jefe de Estado trató de llevar tranquilidad a los ciudadanos de los Estados Unidos acerca de la disponibilidad y el valor del crudo, que ya se habían visto afectados por la situación en Libia, y que podrían complicarse aún más a partir de lo sucedido en Japón, debido a su importancia dentro de los mercados financieros internacionales.

"Los precios del combustible afectan a todos los estadounidenses. Hemos visto un incremento y las familias sienten el impacto", indicó. Aseguró que van a "dialogar" con los socios para unificar criterios y confirmó que están "preparados para usar la reserva estratégica de petróleo" que posee el país.

Obama ordenó a varias dependencias gubernamentales que controlen "la manipulación del precio para no permitir que haya especulación".

"Mientras nuestra economía siga dependiendo del crudo extranjero estas cosas sucederán" admitió. Recordó la necesidad de incorporar fuentes amplias y seguras de energía. "Debemos hacer que nuestra economía sea más eficiente y menos dependiente", subrayó.