El nuevo presidente de la Cámara de Representantes de EEUU, John Boehner, tomó ayer las riendas de ese órgano legislativo con promesas de cambio en estilo y en contenido y con la advertencia de que el Congreso tiene por delante "decisiones difíciles".

Boehner advirtió de que el Congreso afrontará "decisiones difíciles" ante los problemas económicos que atraviesa EEUU.

La sesión del Congreso comenzó en medio de grandes divisiones y con los republicanos al timón de la Cámara de Representantes, desde donde han prometido una lucha contra la Casa Blanca en asuntos como la reforma de salud, el gasto fiscal y la reducción del déficit. Siguiendo los ritos, tradiciones, la ex presidenta de la Cámara, Nancy Pelosin entregó su cargo.