El papa Francisco calificó ayer de "casi satánico" al problema de la violencia contra las mujeres, al tiempo que criticó la "crueldad" de los "usureros" aparecidos durante la pandemia de coronavirus.

"El número de mujeres golpeadas, maltratadas en el hogar es tan, tan grande, incluso por su marido", lamentó el pontífice en una entrevista para el programa "Francisco y los invisibles".