Las solicitudes de subsidios por desempleo en Estados Unidos registraron un nuevo repunte durante la semana pasada llegando a un máximo en tres meses, según consignó hoy la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo. En la semana que finalizó el 19 de noviembre, cerca de 240.000 personas solicitaron nuevas prestaciones por desempleo tras haber sido despedidas, lo que significó 17.000 más que en la semana precedente, cifra que fue revisada a la baja.

California, Illinois y Georgia lideraron el listado de Estados con mayor suba de solicitudes. Los economistas de Wall Street esperaban solo 225.000 pedidos, según la agencia de noticias Bloomberg.

Las cifras reflejan un recrudecimiento en el panorama laboral de Estados Unidos en las últimas semanas, comenzándose a sentir los efectos de las sucesivas subas en las tasas de interés que realizó la Reserva Federal (FED) en lo que va del año.

La FED se encuentra realizando su política monetaria más agresiva en décadas frente a una inflación que alcanzó máximos en 40 años, con el costo de enfriar la economía y, por lo tanto, el mercado laboral. De hecho, el banco central estadounidense proyecta una suba de la tasa de desempleo a 3,8% para el cierre de este año y 4,4% para fines de 2023, frente al 3,7% actual.

El menor nivel de actividad económica -junto con una sobreestimación por un "boom" de ventas y ganancias en la pandemia- afectó en especial a las empresas tecnológicas con firmas como HP, Meta, Twitter, Amazon y Seagate, anunciando despidos recientemente.

También se vio impactado el sector inmobiliario cuya demanda ha caído fuertemente por la suba de las hipotecas, otro efecto del alza de las tasas. Sin embargo, el resto del mercado laboral estadounidense parece resistir los vientos en contra por el momento.

Si bien el índice de solicitudes de subsidios registró alzas desde mínimos que perforaron los 200.000 pedidos en mayo pasado; el mismo sigue presentado cifras por debajo de los niveles históricos y, sin ir más lejos, de 2021. Del mismo modo, la estadística suele registrar una mayor volatilidad cerca de la temporada de fiestas en Estados Unidos, al cerrar el año.

Por su parte, la información oficial indica que el promedio de pedidos en las últimas cuatro semanas -el cual permite atenuar la volatilidad propia de un índice semanal- subió a a 226.750 personas, mientras que la cantidad total de subsidios subió en 48.000 a 1,55 millones de personas en la semana que finalizó el 12 de noviembre, el mayor número desde marzo último.

Los economistas suelen apuntar sus miradas esta estadística, por ser un indicador adelantado de recesiones en los Estados Unidos.

"El incremento de 113.000 en los pedidos totales de subsidios es consistente con los despidos en la industria tecnológica, a medida que se aculan los recortes y los congelamientos de personal en determinadas industrias", explicó la economista Eliza Winger.