Más de 3.800 personas murieron y más de 13 mil resultaron heridas como consecuencia de un sismo de magnitud 7,8 que sacudió el sudeste de Turquía y el norte de Siria.

Al menos 2.379 personas murieron en Turquía en el sismo de magnitud 7,8, detalló el ministro de Salud turco, Fahrettin Koca, y al menos 1.444 personas murieron en Siria, de acuerdo al Ministerio de Salud local. Organismos mundiales no descartan que pueda haber 20.000 muertos.

En Turquía, la cifra de heridos supera los 13.000, aunque esperan que aumente en las próximas horas por el elevado número de personas atrapadas entre los escombros.

La Autoridad de Gestión de Desastres calculó que 3.471 edificios quedaron completamente destruidos, como consecuencia del terremoto de 7,8 que sacudió el país a las 4.17 de ayer (22.17 del domingo en Argentina), y se produjo a una profundidad de 17,9 kilómetros.

El epicentro se situó en el distrito de Pazarcik, en el sudeste de Turquía, a unos 60 kilómetros de la frontera siria.

El movimiento se sintió en el Líbano, Chipre, y hasta en Dinamarca y Groenlandia. La mayoría de las personas estaba durmiendo en sus viviendas.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, señaló que el suceso es "el mayor desastre desde el terremoto de 1939", que dejó más de 30 mil muertos. Además, las autoridades estiman que se registraron unas 50 réplicas.

El Gobierno turco declaró el nivel más alto de alarma y envió 102 unidades móviles a zonas afectadas. Por su parte, la comunidad internacional envió sus condolencias, entre ellos el Gobierno argentino, que expresó su "solidaridad" a través del presidente Alberto Fernández. El cónsul argentino en Estambul, Diego Álvarez Rivera, indicó que por el momento no se registró ningún residente argentino víctima del sismo.