Buenos Aires, 4 de febrero.- "El futuro de Egipto será determinado por su pueblo. Pero la transición debe empezar ahora, antes de las elecciones y la oposición debe estar dentro del acuerdo. Este es un momento de oportunidad. El mundo entero lo espera, y estoy seguro de que los egipcios lograrán el cambio", dijo en ronda de prensa el presidente norteamericano, Barack Obama después de que el vocero de la Casa Blanca, Robert Gibbs ofreciera explicaciones sobre las acciones de los EEUU en Egipto.

De esa forma, la Casa Blanca rechazó el argumento del presidente egipcio, Hosni Mubarak, de que una renuncia suya desataría el caos, y afirmó que la revuelta no cesará, sino que aumentará, si no se dan pasos "concretos" hacia una transición.

Por su parte, Robert Gibbs instó a Mubarak y a su gobierno a dialogar con una amplia coalición de la oposición y grupos de la sociedad civil de Egipto para discutir un cambio político.

Gibbs dio a entender que la única forma de poner fin a la crisis sería que Mubarak renuncie rápidamente, luego de que trascendiera que Washington está empujando al mandatario egipcio a dejar el poder.

"Hay medidas concretas que se pueden tomar y el vicepresidente puede tomar hacia un camino de cambio real que atenúe la inestabilidad y asegure que no profundicemos el caos que él (Mubarak) describe", dijo Gibbs.

"Nosotros -por los EEUU- estamos tomando acciones para adelantar el gobierno de transición. Nos preocupan, basicamente, la violación a los derechos humanos y la censura a la prensa. Además desde que el presidente Obama habló por primera vez con el presidente Mubarak, al comienzo del conflicto, no hemos visto que se apliquen las políticas de cambios que se habían pactado", agregó.