Japón, 23 de marzo.- Las radiaciones en el agua potable de Tokio superaban el límite legal autorizado para los bebés, según las autoridades municipales. El primer ministro japonés, Naoto Kan, ordenó también la prohibición de la leche y las verduras procedentes de las prefecturas de Fukushima e Ibaraki (noreste) tras detectarse niveles radiactivos superiores a los máximos autorizados en brócolis y leche no pasteurizada.

Naoto Kan, pidió a, su vez, a las autoridades de Fukushima que prohíban la distribución y consumo de una decena de verduras de esa provincia, afectada en su costa este por los problemas de fugas de su central nuclear.

El Gobierno indicó que ha encontrado niveles excesivamente altos de radiación en 11 tipos de verduras procedentes de la provincia de Fukushima y en la leche de la vecina provincia de Ibaraki, más al sur. El Ministerio de Sanidad japonés pidió a la población que no consuma esos alimentos, que incluyen espinacas, brócoli, repollo o nabo, entre otros.