Una columna de niños de más de dos cuadras de largo y abarcando todo el ancho de la calle partió ayer por calle Mendoza, desde la puerta de la Catedral (punto de concentración) hasta la Gruta de Fátima, en Rawson. Fue en la 27ma peregrinación de niños a Fátima, que estuvo caracterizada por el canto, las banderas, pancartas, y los saltos, bulla y alegría de los chicos que participaron de esa demostración de fe.
La concentración comenzó poco antes de las 14 horas con un grupo de poco más de 1.000 chicos a los que se sumaron algunos adultos acompañantes. Pero pasadas las 15, un poco antes de la partida, la cantidad de peregrinos se duplicó y siguió aumentando a medida que fueron avanzando en el camino, hasta llegar a unos 3.500 caminantes. Cifra que superó nuevamente a la del año pasado, cuando fueron alrededor de 2.500. Y mucho más a la del 2007, que fueron alrededor de 1.000 niños, según los organizadores y fuentes policiales.
La Acción Católica Argentina (con la ayuda de la Junta Arquidiocesana de Catequistas) estuvo a cargo de la organización. Y no sólo estuvo coordinando cada grupo de niños, sino que se encargó también de armar comisiones para recolectar residuos a medida que fue avanzando la columna.
La propuesta de los organizadores para este año fue la de colaborar con el hospital de niños llevando pañales como gesto solidario. Todo bajo el lema "Demos gracias por el regalo de la vida, compartiéndola con Jesús y nuestros hermanos". Entre una hora y media y dos fue el tiempo que tardaron los grupos en llegar caminando hasta la gruta rawsina. Una vez que llegaron todos, el evento terminó con una misa fuera de la parroquia (por falta de capacidad en el interior). La celebración fue a las 17, frente a la Gruta de Nuestra Señora de Fátima.